‘No hay representación del Chanate en el Cervantino’: Norberto Treviño

Luego de que la coordinadora de Artes Visuales de la Secretaría de Cultura de Coahuila, Edith Leija, declarara para VANGUARDIA que el Taller de Gráfica El Chanate, de Torreón, tiene representación en el Festival Internacional Cervantino a través de los artistas que han trabajado en él y que formarán parte de la exposición colectiva “Segar el mar”, el coordinador de la asociación civil se acercó a este medio para reiterar su postura.

“Está brincando mi lugar como coordinador del taller. Si yo estoy diciendo que no hay representación no hay, por eso hice mi carta al Gobernador y por eso retiré mi pieza”, comentó el también artista visual, quien fue invitado a formar parte de la mencionada muestra colectiva en el festival guanajuatense pero retiró su participación hace unas semanas tras no encontrar apoyo para el proyecto a su cargo.

“No es fácil aceptar que hay clasismo y elitismo”, recalcó Treviño, “no se me toma en cuenta por investigaciones ‘pedestres’ que hago, a pie, que voy en camión, en carro, en uber, en taxi, y ando por toda la ciudad para yo decir que la gráfica es una expresión viva en la ciudad. No soy humanista, soy de los que viven en el polígono donde estas personas, humanistas, de la Ibero, van e investigan y hacen sus anotaciones antropológicas y determina qué es hip-hop, y no sé qué”.

El también maestro grabador que el Chanate está buscando desarrollar proyectos e investigaciones artísticas que “lleven la gráfica más allá de la simple impresión en una hoja de papel”, sin embargo, explicó que sin apoyo esto resulta aún más complicado.

Asimismo recordó que él llegó a la dirección del Chanate, hace diez años, cuando se encontraba en un proceso de transición: pasó de proyecto auspiciado por el gobierno lagunero a asociación civil.

“Toda la primera generación se fue de aquí cuando ya no hubo dinero, cuando el gobierno ya no dio subsidio, porque yo abrí las puertas realmente. Siempre se habló de que el Chanate era inclusivo, que había todos los estratos sociales pero no era cierto. Al primer grupo el Gobierno les ponía lugar, les ponía producción, les ponía papel y hasta dónde exponer. A mí me tocó un poquito de esa bonanza, cuando yo entré”, expresó.

También denunció la falta de una convocatoria pública para seleccionar a los participantes del Cervantino y, al mencionar que Leija nunca se comunicó de manera formal con él —aseguró que fue solo a través de Whatsapp y terceros— aseguró que no es el único que se ha quejado de su trato a los artistas: “Ha sido muy duro, muy agresivo”, dijo.

“Desde un principio abogué por el Chanate, me dijeron que se va a ir al Julio Torri ¡Son veinte años [que cumple el Chanate]! Es importante, hay una producción no solo local, y el acervo es histórico. Hay un compendio del imaginario colectivo. Toda persona que viene al taller deja una copia de lo que hizo, a eso me refiero. Torreón tiene 100 años, es importante este acervo, y gran parte de ese tiempo está registrado aquí”, comentó.

“Hay muchas formas de accionar, no solo con una exposición a muro de 30 artistas coahuilenses. Falta más dinamismo, falta garra, falta propuesta, falta audacia en esto. No solamente es ir a cortar el listón”, continuó.

También denunció que tuvo un tratamiento similar con su exposición colectiva del Taller Lagarto que coordinó y que formó parte del Festival Internacional de las Artes Julio Torri 2019. De acuerdo con Treviño, quedó abandonada en Arteaga hasta que la Escuela de Artes Plásticas Prof. Rubén Herrera la recogió. Esta institución la expondría en su galería en septiembre del 2020, donde continúa en acervo debido a la pandemia.

‘Un mosaico de Coahuila’

Por otro lado, Ana Sofía García Camil, titular de la Secretaría de Cultura, respondió a este medio algunas cuestiones derivadas de lo planteado por Treviño en este y otros medios. En específico reiteró que “lamentamos que alguien tan talentoso como Norberto decidiera no participar, o Alejandro que tampoco va a acompañarnos”, pero que “colectivos como tal no estamos llevando a ninguno [...] La idea es presentar un mosaico de un poquito de lo que es Coahuila”.

Asimismo recordó que la programación fue aprobada por el comité curatorial del Cervantino hace un año y que, como lo mencionaron en un boletín publicado hace unas semanas, solicitaron se ampliara el número de participantes que podrían llevar, al grado de que actualmente Coahuila lleva “un poquito más de programación que el país invitado”.

“Abogamos por que todo fuera presencial, porque en un momento sí nos dijeron que algunas se irían a lo virtual. Pero después de esperar un año, nuestros artistas necesitan el contacto con el público y qué mejor lugar que en el Cervantino”, agregó.

“El Chanate yo lo vi nacer, surgió en un momento en el que yo estaba en el Instituto Coahuilense de Cultura en Torreón, y la verdad, el problema es que aquí es mucho el talento pero no todo puede estar allá por obvias razones. Esperaremos otros foros, también importantes, para llevar al resto de los artistas y creadores, como algunos que se están presentando en la Feria del Libro y ya en el Julio Torri que venga el próximo año integraremos una gran cartelera con coahuilenses y también, estamos viendo con la Secretaría de Cultura Federal, el reactivar este proyecto con Los Pinos que se iba a realizar en el 2020 y donde también gran parte de nuestros creadores iban y que por la pandemia ya no pudieron ir”, continuó.

Otro de los cuestionamientos que hizo Treviño fue que no hubiera una remuneración para los artistas, pues las obras van en calidad de préstamo, sin embargo, García Camil aseguró que todos los participantes del Cervantino “tienen remuneraciones y a todos se les va a pagar su viático, su transporte, su estancia allá”.