Fallece la artista coahuilense Mercedes Murguía a los 76 años de edad
Prolífica retratista y pintora, el legado de la maestra Murguía también perdura en los muros del Centro Cultural Vito Alessio Robles, que ayudó a crear junto a Elena Huerta
Este domingo 18 de febrero se reportó el fallecimiento de la artista plástica coahuilense María de las Mercedes Murguía Arizpe a los 76 años de edad, en la ciudad que acogió a su arte, Saltillo.
Pintora, muralista y orgullosa de sus raíces, la ‘Nea’ destacó en Ciudad de México ante José Muñoz Medina (1967), en España con el gremio de copistas del Museo del Prado y en su tierra natal, donde se dedicó a retratar desde aspectos cotidianos, sus memorias y los rostros “olvidados” dentro de la modernidad.
Desde temprana edad comenzó a pintar y aunque en un primer inicio no se dedicó a ello, ya que habría estudiado en instituciones como en el Colegio Saltillense —en busca de convertirse en secretaria bilingüe—, la Academia Coahuila, y el Colegio Roberts, retomaría su gran pasión durante su estancia en la capital del país.
Sin embargo, la estadía de Murguía en la Escuela Nacional de Pintura, Escultura y Grabado “La Esmeralda” se vería interrumpida por la masacre de Tlatelolco, movimiento social que generó preocupación en su círculo familiar ya que, aunque no participó activamente, tenía relación con militantes del mismo, ya que habría ayudado a hacer mantas para las manifestaciones.
LA OBRA DE MERCEDES MURGUÍA
Condecorada como “Profeta en su tierra” por el alcalde José María Fraustro Siller el pasado noviembre de 2023, así como la Presea Manuel Acuña al mérito cultural y artístico en 2021, esta autora narró algunas de las situaciones cotidianas del día a día en el norte del país, plasmando imágenes relacionadas al México del siglo pasado.
Entre las técnicas que regularmente utilizaba se encontraba el pastel, que destaca en su serie de “indigenismos”. Asimismo, gustaba de pintar al óleo sobre esta misma temática, tal como se puede apreciar en su pintura ‘Madonna Náhuatl’.
Sin embargo, también produjo grandes obras con carboncillo y técnica mixta sobre papel amate, que utilizó tanto para autorretratos como una serie de pinturas sobre criaturas folclóricas mexicanas.
Una de las expresiones que la llevaron a ser ampliamente reconocida vendría de la mano de su “maestra” Elena Enriqueta Huerta Múzquiz, ya que Murguía fue invitada a realizar el mural que muestra la historia de Saltillo en el actual Centro Cultural Vito Alessio Robles.
Con esta experiencia y las palabras de Huerta, que aseguraba que pintar un mural “no es tan difícil”, realizó la obra ‘Ubi Jus, Ubi Societas’ para la facultad de Jurisprudencia de la UAdeC en 2002, así como retratos de dirigentes que había tenido la facultad.
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‘RESTAURADORA’ DE UN MÉXICO PASADO
Entre los temas predilectos de la autora se encontraban los Bodegones compuestos por elementos característicos de la comida mexicana, tal como se puede observar en su obra ‘Morrones’. De la misma forma, llegó a tratar temas relacionados al campo, como en ‘Rumeando’, donde ilustra unas vacas echadas sobre el campo.
Sin embargo, el tema que más le interesaba fueron los retratos, donde capturó desde rostros indígenas hasta familiares y amigos cercanos. De la misma forma, utilizó este medio para retratar figuras relevantes de la época de la revolución, así como los elementos comunes de la época.
