‘El método empleado era la fabricación de casos’: Revela Riva Palacio cómo operaban Zaldívar y Scherer para coaccionar a juzgadores
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Para atender los asuntos de interés político del Presidente, el ahora exconsejero jurídico creó una Mesa de Judicialización, un mecanismo de corrupción institucional que se reunía en Palacio Nacional desde donde operaron casos emblemáticos como Ayotzinapa, Lozoya, la encarcelación de Rosario Robles, entre otros
CDMX.- Desde las altas esferas del Gobierno mexicano se creó un mecanismo a través del cual se presionó a juzgadores con el fin de atender los casos de interés judicial del presidente Andrés Manuel López Obrador. Hoy el periodista Raymundo Riva Palacio da cuenta de ello en su columna “Estrictamente Personal”.
La investigación abierta por el Poder Judicial contra el expresidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Arturo Zaldívar, y sus colaboradores cercanos por vulnerar la autonomía e independencia del sistema judicial, de acuerdo con el también analista político, apenas araña el núcleo de esa maquinaria ilegal.
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En su artículo, Riva Palacio señala a Julio Scherer Ibarra, entonces consejero jurídico del Presidente, como el creador de ese mecanismo a través del cual se socavó bajo presiones la independencia de jueces y magistrados.
“Si la pesquisa llegara al fondo de lo que toca por encima, se podría configurar un caso extraordinario de corrupción institucional desde los más altos niveles del Estado mexicano”, refiere el analista, quien considera que de ser así caerían presos secretarios de Estado y funcionarios de alto rango.
FABRICACIÓN DE CASOS Y CARPETAS DE INVESTIGACIÓN
Raymundo Riva Palacio refiere que a través de una “Mesa de Judicialización”, inventada y coordinada por Scherer, se “atendía los casos de interés político del presidente Andrés Manuel”, en ella participaban la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) y Centro Nacional de Inteligencia (CNI).
El analista detalla que esta “mesa”, que se reunía en Palacio Nacional, se fabricaban casos que luego se entregaban a la Fiscalía General de la República, encargada de abrir las carpetas de investigación.
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“El método empleado era la fabricación de casos con información cierta o falsa de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) y del Centro Nacional de Inteligencia (CNI), que se entregaba a la Fiscalía General de la República (FGR) para abrir las carpetas de investigación”, refiere.
El papel de Zaldívar desde la SCJN, añade el periodista, “era el de instrumentar esos casos en del Poder Judicial para encontrar culpables”. Su brazo derecho era Carlos Alpízar, quien −como señala la denuncia− organizaba reuniones en su rancho cerca de Toluca, a donde invitaba a jueces y magistrados, principalmente en materia mercantil y penal, para darles instrucciones, pero donde también participaban autoridades del ejecutivo, ya sea de la Sedena o de Gobernación.
“Zaldívar era el último brazo de López Obrador para atacar a sus enemigos y alcanzar sus objetivos”, opina el analista.
Sobre las acusaciones en su contra el ministro en retiro ha dicho que se trata de una “maniobra política y mediática” por parte de su sucesora, Norma Piña, “una especie de venganza”. Zaldívar ha sido respaldado por el presidente López Obrador y la candidata presidencial oficialista, Claudia Sheinbaum.
CASOS EMBLEMÁTICOS TRAZADOS DESDE LA ‘MESA DE JUDICIALIZACIÓN’
De acuerdo con el periodista Raymundo Riva Palacio en esta mesa coordinada por Julio Scherer como consejero jurídico del presidente Andrés Manuel López Obrador, se trataron casos como el de Emilio Lozoya, Ayotzinapa, Rosario Robles, el de Juan Collado y Caja Libertad, entre otros.
Refiere que en el caso del exdirector de Pemex, tanto Scherer y luego fiscal Alejandro Gertz Manero negociaron con Lozoya para, a cambio de su libertad, implicar a priistas y panistas en el caso de la corrupción de Odebrecht.
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En la desaparición de los estudiantes de Ayotzinapa “se acordó culpar a funcionarios del gobierno de Enrique Peña Nieto y meter a la cárcel al exprocurador Jesús Murillo Karam”.
Sobre la exdirectora de Sedesol, refiere Riva Palacio, AMLO quiso que fuera encarcelada “por razones personales más que políticas”: “estuvo tres años en prisión a partir de un fallo de un juez vinculado a la parte instrumental de la Mesa de Judicialización, sobre la base de una prueba, una licencia de conducir, apócrifa”
En el caso de Caja Libertad y el abogado Juan Collado, detenido en julio de 2019 y quien ahora goza de libertad condicional, refiere el periodista, “había un viejo agravio del Presidente”.
Collado, quien fue arrestado por presuntos delitos de lavado de dinero, delincuencia organizada, fraude y defraudación fiscal, “denunció a Scherer de ofrecerle salir de la cárcel si vendía Caja Libertad, con la que no se pudo quedar el exconsejero jurídico”.
Riva Palacio considera que no cree que la indagatoria de la Corte llegue al “núcleo” de esa maquinaria, pero añade que la Mesa de Judicialización de Scherer deja “un mapa de colusión de funcionarios, tráfico de influencias, uso indebido de facultades, violaciones al debido proceso y a los principios en ley que rigen”.
