Saltillo: ¿de quién son responsabilidad las banquetas?
Contrario a lo establecido en los reglamentos, en un recorrido realizado por VANGUARDIA, se documentaron serios problemas de mantenimiento y ausencia de banquetas. ¿De quién es la responsabilidad de construirlas?, ¿a quién le toca cuidarlas?, ¿qué dimensiones deben tener?
Sin importar si hablamos de calles de fraccionamientos privados, populares, avenidas o bulevares, estas deben tener banquetas que sean incluyentes, seguras, limpias y amigables al caminar. Sin embargo, estos requisitos no siempre se cumplen.
En 2019, el Índice de Movilidad Urbana del Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) reveló que el 26% de las vialidades en Saltillo no contaban con banquetas.
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A cuatro años de distancia, la ausencia o mal estado de las banquetas es notable en la ciudad.
La legislación vigente en Saltillo es clara: la construcción de banquetas y su cuidado es responsabilidad del fraccionador o propietario del predio.
CALLES SIN BANQUETA
Un ejemplo de malas prácticas se puede observar al norte de la ciudad, en la avenida Colosio, donde hay tramos que no cuentan con banquetas, lo que se torna peligroso para las personas que tienen que transitar por esta área de la ciudad y que no cuentan con un vehículo motorizado que los transporte.
El Reglamento de Desarrollo Urbano y Construcciones para el municipio de Saltillo dice en su artículo 98 que el fraccionador deberá cumplir con las normas de vialidad que regulan el proyecto.
Es decir, el fraccionamiento debe contar con calles, banquetas y áreas verdes.
Estas deben atender las características, especificaciones y dimensiones de las calles y sus banquetas que se han establecido en el municipio.
Las banquetas deben ser de 2.5 metros de ancho. Incluso, cuando necesariamente una calle local tenga que ser cerrada, se hará un retorno de 20 metros de diámetro de alineamiento a alineamiento, con banquetas de 2.5 metros de ancho.
El artículo 126 indica que una vez terminada la urbanización total del área, el fraccionador deberá solicitar al Ayuntamiento la recepción del mismo.
¿QUÉ PASA SI MI CASA NO TIENE BANQUETA?
Para las personas que deciden construir su propiedad, serán responsables de colocar la banqueta.
Estas deberán construirse con concreto hidráulico, con resistencia mínima de 150 kg/cm² a los veintiocho días, espesor mínimo de 8 centímetros y pendiente transversal de 1.5% a 2%, con sentido hacia el arroyo de la calle.
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El concreto de las banquetas estará apoyado sobre una capa de terracería, sometida previamente a una compactación, cuando menos con pisón de mano.
El reglamento también señala que el acabado de las banquetas será integral y con una superficie floteada con llana o escobillada.
“En las banquetas y accesos a lugares públicos, sean éstos abiertos, como calles, plazas y jardines, o cerrados, como en el caso de edificios, se deberá prever la ubicación de una o varias rampas que faciliten el acceso a minusválidos, tomando en cuenta la normatividad en la materia”.
TENEMOS BANQUETA PERO NO SE PUEDE CAMINAR
Además de la ausencia de banquetas, otro problema frecuente en Saltillo es el mal estado de las banquetas, como es la obstrucción de ellas para colocar artículos de venta, talleres o artículos que propietarios de la casa no pudieron colocar en sus cocheras o patios.
En este caso, el reglamento municipal indica en el artículo 206 que los cortes en banquetas o para la entrada de vehículos a los predios no podrán entorpecer el tránsito peatonal o vehicular ni ser inseguros para estos. En caso necesario, la Dirección podrá prohibirlos y ordenar el empleo de rampas móviles.
El tercer problema, más común, son banquetas levantadas por las raíces de los árboles, arbustos que empiezan a invadir el área peatonal o banquetas quebradas.
El artículo 205 indica que, cuando las banquetas sufran deterioro, el propietario tendrá la obligación de repararlas con el fin de que el paso de los peatones sea cómodo y seguro; en su defecto, lo realizará el municipio con cargo de los costos al propietario.
LA IMPORTANCIA DE LAS BANQUETAS
En 2019, la Secretaría de Desarrollo Territorial en México publicó el primer documento en el país para planear las calles con una perspectiva de inclusión y adoptó la Pirámide de la Movilidad donde se muestran las prioridades: de Mayor Prioridad a Menor Prioridad.
Este documento coloca en primer lugar a los peatones; por ello, es importante contar con aceras seguras para caminar.
