Familias de dos mujeres desaparecidas se plantan en Fiscalía de Coahuila
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Exigen información sobre sus seres queridos que desaparecieron hace años
Familiares de dos mujeres que desaparecieron juntos a sus hijos, se plantaron en las instalaciones de la Fiscalía General de Coahuila, en la Laguna, donde exigieron información e investigación sobre el caso de sus seres queridos.
Graciela García Fernández desapareció junto a su hija Mia Harem García García el 23 de mayo de este año en el municipio de Francisco I. Madero. Graciela, de 45 años ahora, tenía cinco meses de embarazo. Mia Harem tenía dos años
José Alejandro García Fernández, hermano de Graciela, dijo que no han recibido ninguna información o indicio de su paradero y estimó que su hermana ya se debió haber aliviado, por lo que ahora su búsqueda no es solo de dos personas, sino de tres.
La última vez que alguien vio a Graciela y su hija fue en una farmacia Guadalajara del centro de Madero, pero nadie, dijo José Alejandro, miró algo nadie manifiesta haber visto algo.
“Fue al mediodía, mi hermana tiene un hijo menor de 9 años que está en primaria y ya no pasó a recogerlo. Salía a la una de la tarde. La niña la llevaba en su carriola y ni eso apareció”, contó el hermano.
Dijo que se enteró cuando la pareja de su hermana fue a buscarla a su casa porque Graciela no aparecía. Desde entonces no han tenido contacto con él.
Recordó que a los tres días se levantó la denuncia y desde entonces viven una pesadilla. “Mi madre no duerme por estar esperando a mi hermana. Duerme con la puerta abierta para abrazarla cuando llegue”, relató.
José Alejandro expuso que las autoridades no dan ninguna información concreta ni les dicen a dónde apunta la investigación.
“Es muy lenta la investigación. Nos dicen que siguen buscando, tratando de localizarla, que se puede tardar más tiempo. Pero exigimos que se agilicen las cosas, que nos ayuden y se pongan las pilas en trabajar”, sostuvo José.
Refirió que en ocasiones han recibido un trato despótico de algunos servidores públicos. “Que sientan empatía hacia los familiares de desaparecidos”, dijo. Hasta el momento no han recibido la sábana de llamadas del celular de su hermana porque, les dijeron, no ha sido emitida la orden del juez para exigirla.
Liliana y Valeria, un año un mes sin saber nada
Liliana Ríos y su hija Valeria llevan un año y un mes desaparecidas. Desde el 7 de octubre de 2017 cuando iban a bordo de una camioneta hacia casa de la suegra.
Pero a la fecha ni la camioneta ni Liliana y su hija han aparecido. “No hay avance certero”, dijo Karla, hermana de Liliana.
“No hemos tenido ni una llamada, un mensaje, ni un estoy bien”, comentó Karla. Las autoridades únicamente le dicen que siguen investigando, lo mismo que le dijeron hace un año.
“Me dijeron que en una semana se comunicaría con nosotros. Pero ya va un año y no ha habido nada”, reclamó Karla.
Mencionó que incrementarán su exigencia y que tienen pensado acudir a la Ciudad de México y presionar con otras personas para que los apoyen. “No puede ser que alguien desaparezca de la noche a la mañana”, lamentó Karla.
Karla Ríos menciona que se han hecho todos los protocolos de búsqueda, desde la alerta pre amber, la alerta alba, hasta el reporte de robo por la camioneta y búsquedas nacionales en distintas instancias. “Pero todo ha sido fallido”, platicó.