El conde Drácula conquista al Fernando Soler
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La compañía cubana Prodanza trajo al Festival Julio Torri un espectáculo oscuro y vistoso inspirado en la inmortal historia de Bram Stoker
La sangre, la violencia y el amor maldito encontraron en la expresión corporal y el movimiento de la danza clásica el lenguaje idóneo para presentar la historia que comenzó un género entero, la de Drácula.
El ballet de Cuba Prodanza, en su gira por México, llegó la noche del pasado miércoles al Teatro de la Ciudad Fernando Soler con este proyecto que toma elementos tanto de la obra original de Stoker como de su más emblemática adaptación fílmica a cargo de Francis Ford Coppola.
En ella el conde transilvano no es sólo un monstruo demoníaco, sino la víctima de los designios divinos y de la amargura que lo maldijeron.
La puesta comienza en los mismos términos que la película de 1992 protagonizada por Gary Oldman y Winona Ryder, con un Drácula en medio de una guerra santa y sus recientes nupcias con Elizabetha.
Cuando un soldado llega con noticias falsas de la muerte del aristócrata, su amada se quita la vida tan sólo momentos antes de la llegada del desdichado conde, quien busca infructuosamente darle descanso eterno a la mujer.
Impedido por los clérigos, pues el suicidio condena a los humanos al purgatorio, Drácula comete un sacrilegio que lo convierte en el monstruo chupasangre y tras siglos de aislamiento en su castillo encuentra en la prometida de Jonathan Harker, Mina, el reemplazo ideal para su amor fallido.
Con esta premisa arranca el primer acto de la obra dirigida por la maestra Laura Alonso, cuyo guión, en colaboración con la coreografía de la puertorriqueña Nana Bradena, presenta la tragedia a través del ballet.
Cada paso, cada gesto y movimiento está cuidado para representar los sentimientos, ideas e ideales de los personajes en escena —interpretados por 30 bailarines en total y protagonizada por Patricia Hernández como Mina y Antonio Núñez como Drácula—, apoyados por música de Mozart, Bach y otros compositores clásicos.
Por ello, seguir la secuencia de eventos no representa problema incluso para quien no está familiarizado con la historia, pues los iconos de los personajes son ya parte del imaginario popular y utilizados por el equipo de producción con eficacia para distinguirlos y destacarlos entre sí.
Visualmente impresionante, el espectáculo de Drácula cuenta en este aspecto con una escenografía de alta calidad, que transporta al espectador a la gótica residencia en la Transilvania medieval o a la Inglaterra del siglo 18.
Este ballet continuará su participación en el Festival Internacional de las Artes Julio Torri 2018 el día de hoy en Monclova y culminará su gira por México el 17 de noviembre en Ciudad del Carmen, luego de haber recorrido 42 sedes por toda la República.
Sobre la directora
> Laura Alonso ha sido ganadora de medallas y concursos internacionales como el Grand Prix de la VIlle y el Jackson International Ballet.
> Fue solista por 25 años del Ballet Nacional de Cuba.
> Comenzó a dirigir desde 1984 el Centro de Promoción de la Danza de Cuba (Prodanza), donde entrena y forma a jóvenes bailarines con el método de la Escuela Cubana de Ballet.
La puesta comienza en los mismos términos que la cinta protagonizada por Gary Oldman y Winona Ryder.
