Recuperate de los gastos vacacionales
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Si sientes que tus finanzas se salieron de control en el último mes, aquí te damos unos consejos para recuperarte.
Después de las vacaciones de verano y el regreso a clases, los bolsillos siempre terminan vacios. Y no es de sorprenderse, muchas veces la falta de planeación o la subida de precios, el dinero suele irse más rápido de lo pensado. Si sientes que tus finanzas se salieron de control en el último mes, aquí te damos unos consejos para recuperarte.
Ahorra un porcentaje de tu sueldo cada mes
Uno de los tips más importantes para recuperarte de las vacaciones es ahorrar. Destina un porcentaje de tu sueldo exclusivo para ahorro y pónlo en una cuenta especial cada mes. Si haces del ahorro un hábito, no tendrás problemas para pagar tus deudas y siempre tendrás un dinero extra para uso de emergencia.
Elabora un presupuesto
Prepara un documento mensual donde coloques los gastos de la semana. Incluye cada uno de los pagos necesarios: vacaciones, inscripciones a la escuela, comida, renta, luz, agua gasolina y otros gastos en familia. Este presupuesto te ayudará a identificar gastos que puedes recortar y por supuesto ahorrar. Sigue este plan y a finales del año verás que tendrás grandes resultados.
Busca ofertas y cupones en línea
Las ofertas siempre son muy estacionales, ya sea en enero o julio las opciones para el consumidor casi siempre son escasas. Sin embargo, en internet puedes encontrar ofertas todos los días, estas ofertas van desde ropa, calzado, viajes y más. Lo más recomendable es que identifiques páginas en línea confiables y que te gusten.
Y si ya estas a punto de hacer una compra en línea, que no se te olvide buscar algún cupón electrónico. Estos cupones son muy sencillos de usarse y lo mejor de todo es que son gratis. El portal de cupones mágicos ofrece cupones para diversas tiendas como Linio México, que cuenta con una gran variedad de productos electrónicos y para el hogar.
Administra tus pagos a través de tu tarjeta de crédito
Las tarjetas de crédito pueden ayudar a financiar tus pagos siempre y cuando no gastes más de lo que no puedas pagar. Controla cada uno de tus gastos y no te dejes llevar por promociones que al final del día sólo te traerán problemas. Y recuerda, más vale prevenir y ahorrar, que lamentar.