La violencia en el noviazgo se acrecienta con nuevas tecnologías
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Consideran que se está perdiendo la dimensión de lo que es la violencia en el noviazgo y entre parejas, pues actualmente se presenta mucha violencia disfrazada de celos.
Torreón.- A decir de Dulce Pereda, director del Instituto Municipal de la Mujer (IMM), la violencia en el noviazgo es latente y se acrecienta con las nuevas herramientas tecnológicas.
Consideró que se está perdiendo la dimensión de lo que es la violencia en el noviazgo y entre parejas, pues actualmente se presenta mucha violencia disfrazada de celos. Es la novedad que entran a buscarte en redes sociales o revisarte el celular; es parte ya de una violencia. No son solo las mujeres también son los hombres, hay una línea delgada de decir me cela porque me quiere.
Pereda estimó que siete de cada 10 mujeres padecen violencia en la relación. Insistió en que hay una línea entre el jugueteo y la violencia. Excusan que las empujan porque están jugando o que la lastimó del brazo porque la agarro. Hay que romper esos círculos de violencia.
La directora del Instituto Municipal de la Mujer, consideró que es necesaria una reflexión de lo que es la pareja, de lo que es y no es el amor. Destacó que la violencia se aprende muchas veces en casa, por lo que hombres y mujeres repiten patrones.
En pláticas que damos las chavas no quieren hablar porque les da pena y preguntan a dónde pueden ir. A veces citamos a hijos y padres y ahí te das cuenta que es una secuencia, comentó.
Según datos del IMM, en el primer cuatrimestre del año, 115 mujeres acudieron por asesoría jurídica y 52 por atención psicológica. Los casos más recurrentes son divorcio, pensión alimenticia y violencia psicológica y eocnómica.
Lo más triste, apuntó la funcionaria, es que muchas veces los papás se rinden y prefieren dejar al hijo en alguna instancia de apoyo. Los jóvenes, reflexionó Pereda, se sienten solos y con la necesidad de pertenencia.
Como padres vemos que ya trabajamos todo el día. Te vas en la mañana y regresas en la noche y no sabes qué hizo tu hijo en ese inter. Los chavos buscan pertenecer a un lugar. No importa que me pegue es el único que me hace caso y me escucha, agregó.