La historia de una máscara: El impacto de Blue Demon en la cultura popular mexicana

México, DF. ¿Cómo surge tu interés por Alejandro Muñoz (Blue Damon) y por qué realizar una investigación sobre este personaje mexicano?

-Mi primer acercamiento es a partir de la máscara y su atuendo, mi interés surgió por la dualidad que desarrolla el personaje de Blue Demon. Luchó en ambos bandos, tanto en el técnico como en rudo, en sus películas fue héroe y villano. La vida de Alejandro Muñoz se desconoce en gran parte porque él decidió matar al hombre para dar vida al personaje. Siempre  mantuvo al margen su vida privada, lo poco que se conoce de su vida es lo que está plasmado en su biografía que en gran parte fue narrada de viva voz y posteriormente fue publicada por editorial Clío en 1999. Mi estudio sobre este personajes nace por la inquietud de ver que Blue Demon es uno de los personajes más reconocidos visualmente y sin embargo existe poca información sobre él. De igual forma no se ha abordado desde un enfoque centrado en la dualidad, esta es una de las partes que también caracteriza al personaje. Blue Demon como representante de la dualidad en los mexicanos a través de su máscara.

-Irónicamente, dos personajes separados por la rivalidad como lo fueron Blue Demon y El Santo, han sido unidos por el tiempo y por la trascendencia de sus carreras pues ambos figuraron en el cuadrilátero, en el ámbito cinematográfico, en los cómics e incluso sus efigies fueron reproducidas en figuras de acción, como parte de tu investigación. ¿Crees que México debería seguir preservando esta tradición o crees que con el tiempo se irá perdiendo?

-Considero que es importante conservar esta tradición que ya forma parte de la historia cultural de México. La máscara del luchador mexicano es algo que nos ha representado y nos sigue representando en el mundo, con sus formas particulares y su múltiple colorido. La luche libre sigue viva porque aún sigue siendo transmitida por televisión por lo que tienen un alcance potencial para trascender fronteras, y por lo que muchas personas tienen acceso, aunque nunca hayan asistido a una lucha en vivo y qué decir de la gente que acude a la arena a presenciar el espectáculo de la lucha libre, es todo un ritual lleno de magia, sonido, luz y color; en el que no importan rangos sociales, todos se unen en esta celebración.



-¿Qué significa la industria de la lucha libre para ti?

-La industria significa una gran oportunidad de expansión y preservación de la imagen. Como dicen: una imagen dice más que mil palabras. Esto ha propiciado que más personas tengan interés por conocer un poco de nuestra cultura, sobre todo en este deporte se ha creado un acercamiento a través de la industria de los diversos medios como televisión, radio, prensas, comics, internet, entre otros. Es por ello que se ha logrado trascender a mi parecer la barrera más difícil, la del tiempo. Que por supuesto la lucha libre se ha ido adaptando sin perder su esencia, para sobrevivir en este espacio donde nos muestra esta fusión entre el deporte y el espectáculo.

-¿Te llamó la atención algún dato en particular al momento de realizar tu investigación?

-Sí, cada uno en su momento ha sido relevante. Pero lo que más me atrapo  fue el momento en que descubrí las palabras de Rolando Vera diciéndole a Alejandro Muñoz "Te llamarás Blue Demon". Desde ese momento se comenzó a escribir una nueva historia. Conocía a Blue Demon y él me dio la oportunidad de acercarme a conocer a través de distintos relatos y documentos a la persona que le dio vida a este personaje, que hoy es una leyenda, lo que puedo decir es que Alejandro Muñoz es un héroe en su propia historia de vida.

-¿Qué fue lo más difícil durante este proceso de investigación?

-La recolección de material, dada la naturaleza de que es un personaje popular, pensé que sería muy sencillo obtener información y material. Cuál sería mi sorpresa de que no fue así, por lo que me di a la tarea de perseguirlo por los lugares más recónditos de la ciudad.

-¿Cómo llegaste a la maestría en Historia del Arte en la Universidad Iberoamericana y de dónde eres egresada de licenciatura?

-Mi  llegada a la Universidad Iberoamérica fue el resultado de la búsqueda del plan de estudios que cumpliera mis inquietudes y la Maestría en Estudios de Arte me brindaba lo que necesitaba en ese momento para poder continuar mi formación integral. Inicié mis estudios en el CEDART Diego Rivera perteneciente al INBA donde concluí estudios de bachillerato con una especialidad en Artes Plásticas. Posteriormente por cuestiones personales tuve que cambiar de residencia  por lo que me fui a vivir a La paz, Baja California Sur. Estudié la licenciatura en Ciencias de la Comunicación en  la Universidad Autónoma de Baja California Sur.

 



-¿Te consideras una apasionada de este deporte?

-Sí. En general me apasionan los deportes, pero la lucha libre es una gran fusión del deporte considero que es integral por la mezclan de las técnicas de varios disciplinas en el deporte como lo es la lucha grecorromana, la gimnasia, el box, entre otras. Si a todo esto le añadimos el colorido en su particular atuendo, es todo  una experiencia visual y en su multiplicidad  se crea todo un performance.

-¿Veremos tu tesis publicada al público, ya que hay muy poco material académico respecto a este personaje?

Sí. Una de las opciones que brinda la Universidad iberoamericana para titularse es la opción de publicación, sobre la cual aún me encuentro trabajando con el afán de que sea accesible a todo el público.

-¿Cómo fue el proceso para la realización e investigación de la misma?

Es un proceso arduo en el cual aún me encuentro inmersa hasta que no esté publicado. Hasta este momento tengo la bendición de disfrutarlo, creo que la investigación es noble porque va trazando los caminos a seguir dada su naturaleza del tema.

-¿Cuál es tu lectura respecto a la diferencia de la lucha libre entre Estados Unidos y México?

-El contexto y la representación que tiene en la lucha en la cultura popular mexicana son únicos. Se puede observar como en un ring  se enfrentan el bien contra el mal, se definirá la victoria a dos de tres caídas sin límite de tiempo, donde el representante elegido, se enfrenta con sus mejores habilidades a su contrincante, el público viven este espectáculo como un desahogo a sus  cotidianidad viéndose incluso reflejados en algunos de los luchadores más idealizados, ya que representan poder, fuerza, dominio, dando la esperanza de que al menos en algún lado se hace justicia. Lo representativos de los luchadores es su vestuario, en especial aquellos que lo hacen acompañar de la máscara, otros que ya han perdido su máscara continúan con la cabellera, pero cada luchador tiene un estilo propio muy acorde al diseño de su imagen. La lucha está representada por dos bandos el bando Rudo contra el técnico (del bien contra el mal)  Donde se mezclan  las técnicas del deporte y el espectáculo, cada luchador posee diversas técnicas y generalmente se destacan en una, por ejemplo, Blue Demon técnicamente hablando, su fuerte eran las llaves aplicadas en los pies y en la cabeza, es un movimiento veloz donde se engancha al contrincante para hacerlo ceder rápidamente causando un  gran dolor. Otros hacen acrobacia aérea además de ser rápida para derrotar al enemigo es visualmente muy atractiva. El público en esos momentos interactúa con su luchador mostrando su apoyo por medio de gritos o ademanes, el público se involucra directamente formando parte del espectáculo. Las reglas entre la lucha de Estados Unidos y México técnicamente son muy semejantes. Creo que la gran diferencia radica en que los luchadores estadounidenses se preocupan más por la estética del cuerpo y el diseño de su imagen a diferencia de los mexicanos que en la mayoría de los casos, lo que les da la identidad es la personalidad de la máscara, que va más allá de un simple diseño pues de ello depende el ensamble del resto del vestuario.

-¿Qué proyectos siguen?

-Por el momento paralelamente a mi trabajo estoy colaborando para el montaje de la exposición titulada: codo a codo parejas de artistas mexicanos. Que se estará inaugurando para el mes de abril. Me gustaría continuar con investigación, no me quiero adelantar a dar el tema preciso, aunque ya se está gestando un nuevo proyecto.