Datos que tal vez no sabías sobre la cerilla en tu oído
COMPARTIR
TEMAS
Es un escudo protector para los oídos, ayuda a diagnosticar ciertas enfermedades y a determinar el nivel de sustancias tóxicas que algún organismo contiene
Muchas personas relacionan la cerilla o cerumen con algo sucio y asqueroso que debe limpiarse con la mayor meticulosidad. Sin embargo, están en un error, se ha demostrado que esta sustancia cumple con importantes funciones del cuerpo humano.
Uno de sus pocos conocidos talentos es que ayuda a diagnosticar ciertas enfermedades y a determinar el nivel de sustancias tóxicas que algún organismo contiene. También se sabe que en el pasado el cerumen fue utilizado como cataplasma para heridas y bálsamo para labios.
Otra genialidad de esta sustancia es que es un escudo protector para los oídos; gracias a los aceites y células muertas por las que está conformada. Especialistas en el origen de fluidos encontraron que la producción de cerilla en personas asiáticas es diferente a la de las occidentales.
Quienes producen cerilla en exceso pueden recurrir a la microsucción, una limpieza a base de mini aspiradora. Algo curioso es que el cerumen puede hacerse más oscuro con la edad y entre más vello haya en las orejas, más difícil será retirar la cerilla.
No se recomienda el uso de cotonetes para limpiar el cerumen. La manera correcta de hacerlo es usando una toalla limpia que sólo limpie la superficie de lo oídos.