Confían que el 60 % del matorral incendiado en Coahuila se recupere en 2011
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La Semarnat y la Comisión Nacional Forestal (CONAFOR) llevan semanas afanadas en tratar de controlar el fuego con apoyo hasta ahora de 1, 200 brigadistas, y de Estados Unidos, que ha proporcionado dos aviones cisterna tipo C-130.
México, D.F..- Un 60 % de los matorrales que se están quemando en el gran incendio declarado en el norteño estado de Coahuila "se recuperará esta temporada de lluvias", afirmó hoy la Secretaría de Medio Ambiente de México (Semarnat).
Esta dependencia estimó, además, que la fauna de la zona, donde el fuego continúa aún sin control, recibirá un impacto variable por el siniestro, momentáneamente muy dañino para los roedores, pero positivo para carnívoros como los coyotes, pumas, linces, gatos monteses y zorras.
Estas últimas especies se beneficiarán de circunstancias como que, tras los frentes que han quemado más de 100.000 hectáreas desde que comenzó por una tormenta eléctrica el pasado 16 de marzo, "aumenta la población de mamíferos pequeños y presas de los cuales se alimentan", indicó.
La secretaría explicó que "en el caso de los matorrales hay especies que aumentan su presencia después del fuego" y señaló, sobre la base de investigaciones elaboradas en ecosistemas similares a los de Coahuila, que "el fuego en matorrales aumenta la fertilidad del suelo tras la quema".
Eso "puede ser aprovechado para un rápido establecimiento de la cobertura vegetal", apuntó en un comunicado.
El ministerio detalló que "la mayoría de los matorrales y plantas herbáceas comunes se pueden regenerar a sí mismas de partes de plantas que sobreviven al fuego, como las raíces y semillas".
En cuanto a la fauna, a los osos negros les favorece "la regeneración y aumento de bayas silvestres que producen los arbustos después de los incendios", mientras que los conejos y liebres pueden beneficiarse de "condiciones favorables con abundancia de comida de la regeneración de la vegetación".
"Los roedores decrecen fuertemente de manera temporal después de un incendio severo, pero regresan la primera temporada después del incendio, usualmente de una manera abundante. Las ardillas y los castores aumentan generalmente su población", indicó la Semarnat.
Un impacto momentáneo tendrá el fuego en varias especies de insectos, que "pueden ser eliminadas temporalmente y volver a establecerse cuando se regenera la vegetación" en algunos casos, mientras que otras son "insensibles al fuego".
"Los venados se benefician de la sucesión de la vegetación que proporciona el crecimiento de nuevos pastos, hierbas y arbustos que son su fuente preferida de alimento", apuntó la dependencia.
La zona del incendio, que presenta varios frentes, la forma un ecosistema donde el 97% de las áreas calcinadas las cubren matorrales y arbustos, y sólo un 3%, árboles.
La Semarnat y la Comisión Nacional Forestal (CONAFOR) llevan semanas afanadas en tratar de controlar el fuego con apoyo hasta ahora de 1,200 brigadistas, y de Estados Unidos, que ha proporcionado dos aviones cisterna tipo C-130.
También vuelan sobre la zona tres aviones cisterna con una capacidad de lanzar 3.000 litros cada uno y seis helicópteros, de los cuales dos cuentan con capacidad para echar 10.000 litros de agua cada uno.
Además, México alquiló un Boeing 747 con capacidad para verter 76.000 litros de agua en la zona, donde la compleja topografía está dificultando los trabajos del personal en tierra, que en las próximas horas aumentará con 400 brigadistas adicionales.
