Los Moreira en la privatización de Pemex
COMPARTIR
TEMAS
¿A usted y a mi qué nos queda de la Reforma Energética? Lo mismo que actualmente nos toca...
Ya se ha dicho todo sobre la iniciativa de Reforma Energética que apenas el pasado lunes expuso el Presidente de la República. Probablemente usted está mareado con tanta cifra y confundido por las versiones contradictorias del mismo tema. Y lo que falta. Ningún análisis, no obstante, ha calculado en qué afecta la privatización de Petróleos Mexicanos a nuestra entidad. Aquí voy.
A la extracción de `gas shale' apuestan el éxito sexenal. Y sucede que las reservas del mineral se localizan al norte de Coahuila, a dos mil metros de profundidad, en la región conocida como Cuenca de Burgos que abarca 31 municipios y se considera el yacimiento más importante de México. Para extraerlo, según Héctor Moreira Rodríguez, saltillense y uno de los consejeros profesionales de Pemex desde 2009, se requieren 390 mil millones de pesos de inversión anual a fin de perforar 30 mil pozos por año. Hasta aquí no habría inconveniente de no ser porque "Pemex no puede hacerlo", la posibilidad de éxito es sólo del 50 por ciento y el negocio quedará en manos privadas, proyectado para iniciar en 2014 o 2015.
Esa película, sin embargo, ya la vimos con Cantarell (en el gobierno de Felipe Calderón) y con Chicontepec (en la administración de Vicente Fox). En ninguno de los dos casos hubo un gran descubrimiento y, por consecuencia, éxito. Centrémonos en el municipio veracruzano. En 1926, cuando se descubrió que había petróleo, era pobre; en 2013, luego de 52 mil millones de pesos invertidos en perforación, sus pobladores continúan en el nivel 5 (el más alto de marginación y pobreza, de acuerdo con la ONU) pese a que la Huasteca ha sido pilar del proyecto Aceite Terciario del Golfo en los dos sexenios panistas. Y lo más grave, de 2003 a la fecha los resultados han sido desastrosos: de los 867 mil barriles diarios que se pretendía extraer, no se produjo ni el 5 por ciento. Dicho de otra forma: de cada peso que Pemex invierte, recupera 25 centavos.
Entonces, ¿quién ganó en Chicontepec? Muy fácil, las empresas contratadas para la perforación de pozos: las texanas Weatherford, Halliburton, Schlumberger y Baker Hughes.
SEMANARIO alertó hace un año (30/07/12) sobre la peligrosidad que supone la exploración de `gas shale' en Coahuila. La técnica que se utiliza para extraer el combustible, denominada "fracturación hidráulica", implica inyectar agua con sustancias químicas, y tóxicas, a presión alta para detonar las rocas lutitas. El 40 por ciento del líquido se recupera y el resto queda en el subsuelo, con el riesgo de contaminar los mantos freáticos, específicamente de Piedras Negras, Hidalgo, Guerrero, Sabinas y Monclova. ¿Es necesario esto?
Pero el interés no es nuevo. Siendo legislador federal, Rubén Moreira Valdez firmó en septiembre de 2009 el punto de acuerdo con el cual se creó la Comisión Especial de la Región Cuenca de Burgos en la Cámara de Diputados. Hace unos días, investido como gobernador, declaró: "somos un estado 100 por ciento industrial y si se retrasan las reformas, empieza a padecer (.) no podemos quedarnos con la riqueza petrolera, ni de hidrocarburos, en el fondo de la tierra".
Por su parte Héctor Moreira Rodríguez (quien por cierto, asistió como invitado especial a la toma de protesta como gobernador del otro Moreira, Humberto, cultivando a la fecha esa relación con la familia) expuso hace un mes a inversionistas de Estados Unidos, en Nueva York, que en México "ya hay consenso para abrir Pemex". En su edición del 6 de agosto el portal de Internet Reporte Indigo difunde una entrevista con él, a quien describe en un par de líneas que merecen ser citadas: "Moreira, doctor en Química por la Universidad de Georgetown, sonríe cuando habla de shale gas. Sus ojos brillan, se acomoda en su asiento y enumera las ventajas de esta especie de bálsamo que hará más feliz y más rica la vida de los mexicanos".
La mejor perspectiva, como casi siempre, la tienen en el extranjero. Así, la publicación británica The Economist diagnosticó esta semana, en su opinión, los problemas de Pemex: "un sindicato hinchado y mimado"; "burocracia interna sofocante"; "una serie de malas inversiones en los últimos años"; "nunca se le ha tratado como una empresa con fines de lucro"; "la junta carece de experiencia en los negocios"; "no hay autonomía de decisiones"; "el gobierno chupa dinero en efectivo para compensar la falta de ingresos fiscales que recauda en el resto de la economía". Punto. Pero nada de esto es mencionado por Enrique Peña Nieto en su propuesta. Tampoco señala, en ninguna de sus 29 páginas, al Sindicato de Trabajadores Petroleros (STPRM), ni que bajarán los precios de la gasolina (o que al menos ya no subirá mes a mes como viene ocurriendo desde hace años).
Cortita y al pie
De concretarse la privatización de Pemex se incrementará la inversión privada en la entidad, pero no por mérito de Fomento Económico, ni como sinónimo de desarrollo, ni como salvavidas a la `megadeuda'. El punto más importante será la distribución de beneficios: a los Ayuntamientos de los municipios donde Pemex trabaja les `regala' gasolina y asfalto una vez al año. Si acaso alguna obra como rehabilitación de espacios educativos, pero nada más. ¿A usted y a mi qué nos queda de la Reforma Energética? Lo mismo que actualmente nos toca: amortizar mes a mes los aumentos al precio de la gasolina, y enterarnos de los excesos y la corrupción impune del STPRM.
La última y nos vamos
Si le interesa dar seguimiento a esta columna, en el Registro Público de la Propiedad revise las compraventas de terrenos que, de 2009 a la fecha, se han realizado en la zona donde se proyecta la exploración de `gas shale'. ¿No se imagina quiénes son los nuevos propietarios? Se sorprenderá.