La Teoría del Todo
COMPARTIR
TEMAS
Uno de los grandes truinfos de la pasada entrega del Oscar, además del de “Birdman”, fue precisamente el de la terna del Mejor Actor, que le arrebató la estatuilla dorada a su protagonista Michael Keaton.
Esto lo hizo un joven actor británico que salvo los conocedores de cintas nominadas o ganadoras del Oscar de años pasados como lo fueron “Mi Semana con Marilyn” (Simon Curtis, 2011) o el musical “Los Miserables” (Tom Hooper, 2012), en el cine comercial hollywoodense apenas hasta el mes pasado sobresalió dentro del reparto de una fallida superproducción como un villano intergaláctico: “El Destino de Júpiter”.
El es Eddie Redmayne, quien se alzó sin todavía creérselo hace casi quince días con un más que merecido Oscar al Mejor Actor de 2014 por el papel protagónico dentro de la película biográfica “La Teoría del Todo” (“The Theory of Everything”), de James Marsh, que a partir de este viernes se estará exhibiendo en las salas de cine de Saltillo.
Muy merecido porque Redmayne se comprometió para el nada fácil reto de personificar al célebre físico Stephen Hawking, autor de la teoría que da título al filme por la que llegó a ser considerado el heredero natural de Einstein. ¿El resultado? La más notable pero a la vez naturalista interpretación de un compatriota suyo desde que el primer actor Daniel Day Lewis obtuvo su primer Oscar por “Mi Pie Izquierdo” (Jim Sheridan, 1989).
“La Teoría del Todo”, por su parte, da seguimiento a la vida de Hawkins desde sus días como un estudiante en apariencia como cualquier otro de sus compañeros en la Universidad de Cambridge en los años 60, y quien también como ellos en medio de sus estudios de cosmología se siente automáticamente cautivado por una joven estudiante de artes, Jane Wilde (Felicity Jones), con quien vive un romance tan fructífero que se casan todavía en medio de los estudios.
Sin embargo, no todo es miel sobre hojuelas, ya que justo en medio de los estudios en los que llega a terminar hasta un doctorado en física, Hawking comienza a padecer una enfermedad motoneural relacionada a la esclerosis lateral con la que paulatinamente se va paralizando por completo forzándolo a final de cuentas a comunicarse a través de un aparato generador de voz pero lo cual no le impidió ni a realizarse en su vida profesional el genio astrofísico que se le considera ni familiar al convertirse en padre de tres hijos y vivir una relación de amor plena con Jane a pesar de los momentos en que las circunstancias parecieron destinarlos a separarse para siempre.
Dirigida a la manera de una fina orquestación imperceptible por el también británico James Marsh, ganador por su parte de un Oscar al Mejor Documental de 2008 por “Man on Wire”, “La Teoría del Todo” logra en su conjunto al tiempo de una gran biografía fílmica, una enternecedora historia de amor, amor a la vida, a la pareja, y a una profesión que lleva integrada una misión, ahora sí que todo en uno, como en botica … pero de un pleno lujo artístico. Si gusta del buen cine no se la pierda.
Comentarios a: alfredogalindo@hotmail.com; Blog: alfredogalindo.com; Twitter: @AlfredoGalindo