Familias de poder
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Un mexicano, Roberto Alcántara, ya es accionista de El País, el diario más influyente en español
Con la muerte y partida de don Lorenzo Zambrano (artífice de CEMEX) en mes pasado, se fue uno de los últimos guerreros y tótems empresariales, los cuales son autoridad moral y su opinión política pesa a tal grado, que su voz desataba vendavales o aplacaba tormentas (cuando se ventilaba por parte de una batería de empresarios, la influencia para que el gobernador de Nuevo León, Rodrigo Medina en el inicio de su gestión, se fuera y renunciara. Zambrano criticó agriamente a quien se iba por la inseguridad en NL). Todos callaban cuando él hablaba.
Setenta años son muy buenos para vivir en la tierra y Lorenzo Zambrano lo hizo a rienda suelta. Pero, con su partida, me he puesto a reflexionar sobre estas familias de poder empresarial, estos ricos, estos amos del universo que son modernos Reyes Midas los cuales no pocas veces mandan sobre el poder político. Y los dos anteriores puntos sirven para contextualizar lo siguiente: hace también días, se dio la siguiente noticia que fue gris en su momento por la efervescencia del futbol que a todos embelesaba. El poderoso grupo de medios de comunicación, el español PRISA, anunció de su reconfiguración con la inclusión de un socio mexicano, Roberto Alcántara Rojas, quien invertiría 100 millones de euros al comprar 9.3 por ciento de sus acciones. Todo, a través del grupo mexicano Occher.
Alcántara ya era miembro del Consejo de administración de PRISA y de la Comisión Ejecutiva desde febrero de este año; es también firmante del contrato de accionistas de la compañía, lo que lo convierte en socio de referencia. Y PRISA, todo mundo lo sabe, edita el periódico más influyente en español, El País. Fundado por don Jesús de Polanco, ya muerto, ahora la familia tiene acciones del Grupo Editorial, pero ya al mismo nivel de ésta y influencia total, es la incursión del mexicano Alcántara (posicionado como el empresario número 90 en la lista de los más ricos de México, según la poderosa revista Forbes), quien es Presidente del Grupo Toluca y de la aerolínea VivaAerobús, fundada en 2006.
Extraño país el que habitamos entonces. Mientras poco más de 62 millones de mexicanos vivimos en la pobreza, la fortuna acumulada de 37 familias de las más ricas de México, suma 18 mil millones de dólares, equivalente al 15.1 por ciento del PIB. Aquí están Carlos Slim, Alberto Bailleres y familia, Germán Larrea, Ricardo Salinas Pliego, Eva Gonda Rivera y familia, Familia del Valle, los Servitje, Jerónimo Arango, los González Novoa
Esquina-bajan
¿Cuándo cambiarán las cosas en México? No lo sé. En un mundo de libre competencia y mercado, en un mundo donde en teoría todas las fronteras han sido abolidas por la globalización (no hay fronteras para las mercaderías, pero siguen estando altas e implacables para los seres humanos) y todos somos iguales ante la ley para iniciar un negocio como emprendedor y en teoría lector, usted puede iniciar de cero y lograr llegar a ser el segundo Slim en apenas años. Mentira podrida.
Tome usted los siguientes datos para su reflexión y vea el estado de jodidez en que estamos por siempre. En el año 2000, iniciando milenio, el PIB de México era de 581 mmdd y la fortuna de los principales listados mexicanos por Forbes equivalía al 4.2 por ciento de dicho PIB. Para 2012, la fortuna de las 10 familias más ricas correspondía al 12.44 del PIB. Hoy, lo vimos líneas arriba alcanza ya 15.1 por ciento. Las consecuencias son funestas: México es un paradisiaco lugar para hacer fortuna y para concentrar la riqueza. Somos una fábrica de ricos a costa del trabajo de los obreros y los pobres.
Diez familias son dueñas de la octava o novena parte de la riqueza generada por todo un país. Y da la casualidad que este México nuestro siempre está en crisis, tratando de salir del hoyo negro en el cual estamos la mayoría de menesterosos en un Estado de más de 112 millones que no, no podemos competir ni todos juntos con la riqueza de 10 familias.
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Un mexicano, Roberto Alcántara, ya es accionista de El País, el diario más influyente en español