¿El desalojo de Reforma? ¡Ja!

Los supuestos maestros de Oaxaca, en realidad un enorme conjunto de parásitos sociales que han sabido lucrar como nadie con el terror de los políticos mexicanos, capaces de ceder cobardemente ante cualquier demanda de aquellos con tal de que no sea alterada la paz pública a través de alianzas perversas con diversos organismos sindicales invariablemente listos para desestabilizar al gobierno, finalmente, y en apariencia, fueron desalojados por la vía de la violencia, del Paseo de la Reforma, una de las grandes arterias capital de la República.

No puedo dejar de ser novelista y por lo tanto, una de mis fascinaciones consiste en tratar de encontrar la cara oculta de la política mexicana, es decir la realidad de lo acontecido dentro del mundo maravilloso de la ficción. Intentaré explicarme: la reforma educativa estableció que los maestros sindicalizados cambiarían de patrón: A partir de dicha reforma los actuales furiosos defensores del atraso, ya no cobrarían sus emolumentos en los gobiernos estatales, sino a través de la SEP, de esta manera ya no se les pagaría a los muertos ni a los aviadores, ni a aquellos profesores que no asistieron a clases, ni a los comisionados que se cuentan por decenas de miles. Quien no asistiera a las aulas durante tres días consecutivos sería dado de baja... ¡Jaaa! En la práctica las premisas básicas de la Reforma Educativa no se han cumplido, es más, ni se sabe cuántos maestros dan clases y cuántos no. El caos sigue siendo mayúsculo al igual que los abusos.

Los maestros que en apariencia fueron desalojados el día de ayer por las fuerzas del orden, en realidad vieron coronadas con el éxito todas sus pretensiones con arreglo al uso inteligente y eficiente del chantaje Cualquier gobierno medianamente sólido y consciente de su autoridad jamás hubiera permitido que un movimiento de extracción fascista callejero lo hubiera atemorizado al extremo de ceder y pagar todos aquellos días o meses en que los maestros no trabajaron mientras estaban dedicados a incendiar Oaxaca. ¡Claro que no se respetaron los derechos humanos de los niños de aquella entidad que llevan más de dos años sin clases! Por si fuera poco también lograron no sólo que se les pague salarios y privilegios caídos a 3 mil 600 supuestos educadores, sino obtuvieron las garantías suficientes de que no serán destituidos en el evento de que no asistan a las aulas por la razón que sea ¿Más? ¡Sí! También consiguieron que se concedan plazas a personas que no están en el censo educativo y que, asimismo, se creen puestos nuevos a presuntos maestros que no se someterán en ningún caso a exámenes de conocimientos. ¿Más parásitos? ¿Y nuestros niños?
En resumen, Oaxaca, uno de los estados más atrasados de la República junto con Chiapas, Guerrero y Michoacán, no verá aplicada la Reforma Educativa ni servirá para nada la tan encantada federalización de los pagos y, por supuesto que continuarán quitando y poniendo profesores a su antojo, usufructuando plazas laborales y colocando a funcionarios de alto nivel en el Instituto Estatal de Educación Pública. ¿Qué tal?

Conclusión: Cuando ya dichos parásitos habían acabado de chupar como auténticas sanguijuelas la sangre del Gobierno Federal, mientras la ciudadanía observaba atónita la inmovilidad de la autoridad, entonces se procedió a la escenificación de la última parte del programa: a pesar de haberles concedido todas sus pretensiones, decidieron entonces hacer una marcha postrera por el paseo de la Reforma como una ostentación de fuerza y de burla a la sociedad.

Fue entonces cuando las fuerzas policiacas federales y locales decidieron, ya hartas, desalojar esa importante arteria para dar satisfacción a las airadas protestas de la ciudadanía.

No creo absolutamente nada: mi punto de vista consiste en tratar de demostrar que dicho desalojo correspondió a un acuerdo previo entre la Secretaría de Gobernación y los parásitos para que éstos se presentaran al día siguiente, de nueva cuenta en el Paseo de la Reforma y la autoridad pudiera lavarse la cara de alguna manera con un desalojo previamente convenido: Ustedes se presentarán mañana y serán desalojados por la fuerza para que la sociedad pueda comprobar que se respeta la ley y se entienda que ya no se permitirán más bloqueos callejeros en la capital de la República. Queda entendido que se retirarán pacíficamente a Oaxaca sin convocar a ninguna otra organización sindical para ocasionar un trastorno mayor.

Mentira, otra vez mentira: volverán una y mil veces porque ya conocieron el camino para intimidar a los cobardes que, desde luego, no se lavaron la cara

@fmartinmoreno