Desarrollo sustentable regional y fracking

Rubén Pesci dijo: para ser hay que habitar, y para habitar hay que construir. La utopía de construir entre muchos, puede ser posibleCarlos Gómez

El connotado filósofo latinoamericano de la sustentabilidad, Rubén Pesci, en su alocución el pasado viernes dentro del Foro La explotación del gas shale: el cómo sí dio cátedra de cómo la gobernanza de las poblaciones de los territorios prospectivos para la extracción de este gas también llamado gas lutitas, podría hacer posible su desarrollo con una perspectiva de región retomando ejemplos de lo que está ocurriendo en la zona patagónica de su natal Argentina. Dijo en su conferencia que, cito: Para ser hay que habitar, y para habitar hay que construir. La utopía de construir entre muchos, puede ser posible.

Parece muy difícil llegar a una construcción colectiva de pensamiento entre miembros de una municipalidad rural, más aún si la construcción se debe generarse entre más de treinta municipios de tres entidades federativas. Pero hoy día, es imprescindible que los grupos de interés de los habitantes del noreste de México hagan un frente común que tenga enfoque y metodología para encarar la incursión de empresas del extranjero y sus connacionales en un territorio mayormente desértico, pero que guarda en las profundidades de su suelo un tesoro incómodo en el corazón de la Cuenca de Burgos que involucra territorialmente a 39 municipios distribuidos en los estados de Coahuila, Nuevo León y Tamaulipas.

En México se estima que existen 545 trillones de metros cúbicos de gas shale haciéndolo figurar en el ranking mundial con el sexto lugar de reservas de este energético no convencional. Allí está el detalle

Hacía más frío que el tolerable aquella tarde en Bustamante, Nuevo León, un par de los expositores dijo que a pesar del clima inclemente, valía la pena haberse congregado. El mismo Pesci se refirió a los asistentes como un grupo de locos con deseos de cambiar las cosas y de emplear la explotación del gas shale para apalancar una revolución social, económica y política.

El mexicano Carlos Efrén Ramírez, coordinador de la Unidad Laguna de la UAAAN, expresó claramente que si se tecnificaba el empleo del agua en el agro podría haber importantes excedentes que podrían aplicarse en cualquier otro campo económico haciendo alusión de su empleo a presión en la fractura de las piedras lutitas localizadas en la profundidaddel subsuelo. La realidad es que según el investigador lagunero hay un desperdicio del 48 por ciento del agua. Quiero destacar que Ramírez prefirió utilizar el término aprovechamiento sustentable en lugar del de explotación al referirse a la extracción del gas shale.

Comparto que no sólo hubo personas del medio académico en el foro. Acudieron sencillas pero preocupadas personas que en el día a día tienen que trabajar el campo. Uno de ellos, el productor de nuez Óscar Santos mostró su optimismo porque luego de la guerra sufrida a merced de la delincuencia organizada sin el apoyo de ningún gobierno, la región podría activarse económicamente siempre y cuando se privilegie el talento de los jóvenes locales con una preparación previa por parte de las universidades públicas, no sólo para los procesos que implica la extracción del gas shale sino también en aquellas actividades en concordancia con la vocación económica de cada municipio.

Óscar Santos es un hombre capaz de defender sus haberes hasta con las armas, pero finalmente es un ser humano que con enorme esfuerzo ha logrado frutos del ecosistema de matorral espinoso tamaulipeco, que no es poca cosa. Por eso cuida sus haberes.

Una propuesta que valdría la pena revisar es la del Clúster de Minería e Hidrocarburos de Coahuila porque incluye la pertinencia de una manifestación de impacto social por parte de los perforadores para que antes de emprender el proceso de la extracción del gas lutitas obtengan la licencia social de las poblaciones en base a cuidar su buen manejo del medio ambiente y de contar con programas de gestión en materia de salud, seguridad y empleo.

Muchas veces en lo privado he expuesto la necesidad de potenciar la inteligencia social. Estoy cierto que en ámbitos en los que reina la ignorancia, la prepotencia y la incomunicación no es fácil llegar a acuerdos, pero qué satisfactorio es participar en plataformas en las que se permea la transparencia y la horizontalidad de hombres y mujeres con distintas formaciones profesionales pero con el deseo superior de preservar el patrimonio cultural y natural de sus pueblos.

Ningún pueblo es pequeño ante el río de tiempo universal. La Declaratoria de Bustamante que resultó del foro en el que participé y que significa un documento que aborda las preocupaciones en materia de medio ambiente, sociedad y economía locales frente a la exploración y explotación del gas de lutitas, tiene los elementos suficientes para ser un digno referente de los ciudadanos del noreste mexicano como entes pensantes y actuantes.