Coahuila: el anuncio de un liderazgo inexistente
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En esta semana, el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) dio a conocer su Índice de Información Presupuestal Estatal (IIPE) 2014.
Muy pronto, acá en Coahuila, el Ejecutivo publicó en su página (www.coahuila.gob.mx) el boletín titulado: Ocupa Coahuila liderazgo nacional en Buenas Prácticas de Información Presupuestal: IMCO.
Para mayor detalle, en el primer párrafo del texto redactado en Palacio de Gobierno puede leerse: De acuerdo al Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), Coahuila ocupa el primer lugar nacional en Buenas Prácticas de Información Presupuestal por el desglose de transferencias a organismos de la sociedad civil, y porque distingue entre partidas de recursos propios y las que provienen de la Federación.
¿La novedad? Pues que el IMCO no reconoce ningún primer lugar en el rubro de buenas prácticas. O, puesto en palabras llanas, el Gobierno de Coahuila miente al presumir, por sus canales oficiales, un primer lugar nacional inexistente.
El IIPE mide la calidad de la información presupuestal de los estados, y tiene como propósito eliminar condiciones de opacidad. Es, para decirlo rápido, el ranking de la transparencia sobre los dineros públicos. De aquí su importancia.
El año pasado, en este mismo Índice, Coahuila quedó en el lugar 30; para este año escaló 24 posiciones y llegó hasta el sexto lugar. Esta sí es una noticia: de estar prácticamente en el suelo, llegó casi a los primeros cinco lugares. ¿Qué necesidad hay de andar inventando?
Coahuila, efectivamente, es nombrado dentro de las buenas prácticas. Pero, ojo: el IMCO no reconoce lugares; no hay, como sugiere el boletín estatal, una diferenciación ni hay parámetros para decir que una buena práctica es mejor que otra. El comunicado estatal persiste en su intento por inducir al error cuando señala el IMCO detalló que el segundo lugar nacional en Buenas Prácticas lo ocupa el Estado de México. En ningún lugar, en ningún momento, el IMCO pudo detallar esto.
En la página del IMCO se enuncian alfabéticamente las buenas prácticas. Así, por orden alfabético y no alguna otra razón, Coahuila está al principio de la lista. ¿Cabría pensar que fue un error de quienes están tras el boletín? Por la manera en que se redactó, difícilmente.
Con piezas de verdad, las instancias de comunicación social del todavía Gobernador inducen (innecesariamente) al error y mienten. Como agencia de propaganda, hasta en donde no hay virtudes las inventan. Y ni comezón les dará faltar a la verdad.
En el IIPE 2014, se menciona a Coahuila en otra ocasión: en las malas prácticas.
El estudio señala una importante carencia en el entramado normativo coahuilense: la falta de claridad en el límite de endeudamiento. El asunto se mantiene, pues, como el Talón de Aquiles. Sobre esto, convenientemente, el comunicado estatal (por supuesto) ni pío dice.
Ni cómo construir una relación sana y de confianza cuando un gobierno (con intención o por ignorancia) desinforma, induce al error y confunde. Así las cosas, los gobiernos podrán abrirse pero nadie querrá entrar.
Lamentable, por cierto, cuántos medios de comunicación (ingenuamente, quiero creer) replicaron la desinformación. Cabe un sentido de autocrítica y una revisión a los procedimientos internos.
@victorspena
www.victorspena.net