Dan último adiós a Irving, joven que murió en la sierra de Ocampo, abandonado por ‘polleros’
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CUATRO CIÉNEGAS, COAH.- Una dolorosa despedida, entre gritos y llantos desgarradores, fue la que familiares y amigos dieron a Irving Jinéz Villarreal, joven de 23 años oriundo de Cuatro Ciénegas, quien murió en la Sierra de Ocampo, buscando cruzar a Estados Unidos.
El joven de oficio mecánico, fue localizado sin vida la mañana de este jueves gracias a los brigadistas que iniciaron la búsqueda de él y otros tres jóvenes que fueron abandonados por los dos “polleros” que les guiaban.
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El rescate de su cuerpo se realizó con un helicóptero del Gobierno del Estado, que por dos días sobrevoló el área rocosa y de difícil acceso y fue trasladado a Múzquiz, de donde por tierra llevaron a Cuatro Ciénegas, para entregarlo a sus familiares.
Desde la madrugada de este viernes fue velado y al amanecer fue llevado a la parroquia San José, para finalmente sepultarlo en el panteón del Pueblo Mágico.
Gisela, su esposa y madre de sus cuatro hijos, gritaba desconsoladamente al ver el cuerpo de su esposo, quien habría partido hacia Estados Unidos con la idea de trabajar para mejorar sus vidas.
Los padres de Irving, sus cuatro hermanas y todos sus amigos, se mostraron desconsolados por la partida de un joven que siempre fue amable con todos en la comunidad.
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Tras el entierro del cuerpo, la familia pidió a las autoridades coahuilenses que no quede impune la muerte de Irving, y exigieron que a los dos “polleros” que lo llevaron a la sierra y le abandonaron, se les aplique todo el peso de la ley.
Aseguran que estas personas, son dos cieneguenses a quienes conocían de “toda la vida” y que se aprovecharon de la necesidad de los jóvenes que les pagaron por guiarlos hasta el vecino país.
Al momento Irving, de Cuatro Ciénegas y Franzua y Alejandro, de Ocampo fueron encontrados sin vida y sepultados por sus familias, se trabaja en la búsqueda de Diego Ibarra otro joven de 22 años nacido en Cuatro Ciénegas, quien también fue abandonado en la zona.
