Cine de futbol, en deuda
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Pese a la popularidad del balompié en México, pocas películas futboleras se han filmado en nuestro país
México, DF. El cine y el futbol llegaron a nuestro país al mismo tiempo. Son dos de los pasatiempos favoritos del mexicano, pero cuando se han combinado, el sabor ha resultado más bien amargo.
El cinematógrafo llegó a México en 1896, año en que Porfirio Díaz veía, en el Castillo de Chapultepec, las imágenes enviadas por los Lumiere. En Pachuca, los mineros ingleses pateaban los primeros balones de futbol en nuestra tierra.
El cine y el futbol parecían predestinados a contar juntos sus historias, pero la realidad es disímbola, pues más bien parecen estar divorciados, como si uno no estuviera hecho para el otro.
"El futbol no ha sido explotado como se debiera en el cine, simplemente porque no se encuentra la historia que desate el boom", afirma a EL UNIVERSAL el director cinematográfico, Miguel Rico.
"Las películas de futbol en México han sido malísimas y en el mundo van por el mismo rumbo. A la gente le interesa más ver triunfar a un individuo, no a un conjunto", sentencia el cineasta Felipe Coria.
Los ejemplos no ayudan: Futbol de Alcoba, El Futbolista Fenómeno, El Chanfle y El Pichichi del Barrio son algunas de las películas mexicanas futboleras.
De las miles de películas que se han hecho en México, "sólo alrededor de 20 son de futbol. Eso sí, de boxeo se han hecho más de 100, porque al público le motiva ver cómo un personaje viene de abajo y se supera", asegura el historiador de futbol, Carlos Calderón. "Aunque el futbol es un deporte del pueblo, el pueblo mismo prefiere voltear a crear a sus héroes individuales en el boxeo".
En el futbol, como en el cine, el negocio manda. Si las películas no son económicamente redituables, la industria se aleja de ellas. "El futbol puede ser muy vendible en el cine, pero no han sabido hacer una película que explote bien todas las cualidades del futbol y se negocie con ellas", agrega.
No se tiene que ir muy lejos para buscar ídolos, personajes, porque las historias están aquí. Sólo falta, coinciden los expertos, saberlas contar... y vender.
"Clío hizo un programa sobre Cuauhtémoc Blanco, contó su historia y hasta el momento lo han repetido siete veces en la televisión. La primera vez tuvo un rating de final de telenovela. Así que el futbol sí te vende; un personaje, su biografía, su ascenso al triunfo sí es de interés. En ese momento era Cuauhtémoc, ahora podría ser El Chicharito. Los mismos directores, productores y hasta los directivos deberían voltear e intentarlo. Sí, en el pasado no se ha tenido éxito económico, pero estaría bien volver a darle otra oportunidad al cine", dice, convencido, Calderón.