Cataluña o cuando el independentismo vasco cedió el testigo
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Cataluña, en el noreste de España, es una de las regiones más ricas del país.
Bilbao, España.- O vemos una aceptación con toda naturalidad del derecho a decidir o veremos una declaración unilateral de independencia". Hace año y medio, en el Colegio de Abogados de Vizcaya, un ex político disertaba con estas palabras sobre el viento independentista en Cataluña.
"O me das la palabra o me marcho", defendía con cierta teatralización el referéndum de independencia que perseguía celebrar en Cataluña el jefe del Ejecutivo regional, Artur Mas, y que posteriormente prohibió el Tribunal Constitucional español.
Aquel hombre que disertaba en Bilbao no era un cualquiera. Sabía de lo que hablaba mientras veía cómo en Cataluña avanzaba una vía que él había intentado sin éxito abrir años atrás en el País Vasco.
Juan José Ibarretxe fue jefe del gobierno regional durante 10 años, de 1999 a 2009, y dio su apellido a un plan que, en último término, perseguía la independencia de la región del norte de España.
Hasta el de Artur Mas en Cataluña, el vasco había protagonizado el mayor desafío soberanista desde una región al Estado español.
Pero Ibarretxe, al frente de un gobierno encabezado por su Partido Nacionalista Vasco (PNV), se quedó en su día bastante lejos del punto al que ha llegado ahora Artur Mas, que da a los comicios del domingo en Cataluña carácter de plebiscito sobre la secesión.
Si las listas secesionistas logran mayoría absoluta en el nuevo Parlamento catalán, por mínima que sea, asegura que proclamará la independencia de España en un máximo de 18 meses.
La forma en la que el Estado hizo frente al plan del vasco, tanto política como judicialmente, sentaron un precedente con algunas similitudes con el momento actual.
En octubre de 2003, el entonces "lehendakari" presentó el "plan Ibarretxe", una reforma del Estatuto de Autonomía -la ley básica que rige el funcionamiento de la región- que contemplaba un estatus de libre asociación del País Vasco a España y, entre otras cosas, introducía el derecho de autodeterminación, un poder judicial propio y el reconocimiento de la ciudadanía y nacionalidad vasca.
El gobierno que entonces presidía José María Aznar, el hombre que designó sucesor al frente del Partido Popular (PP) a Mariano Rajoy, intentó frenarlo impugnándolo ante el Tribunal Constitucional cuando comenzó su tramitación en el Parlamento vasco. Pero la corte decidió que había que permitir que siguiera su curso.
El Parlamento vasco lo aprobó e Ibarretxe amenazó con convocar a un referéndum sobre la independencia si el Congreso de los Diputados lo rechazaba.
El gobierno de Aznar respondió entonces con una modificación del Código Penal para castigar con entre tres y cinco años de cárcel a los cargos públicos que convocasen elecciones o referendos sin autorización del Parlamento español. El socialista José Luis Rodríguez Zapatero, tras llegar al poder en 2004, la eliminó.
Ibarretxe presentó su plan en febrero de 2005 en el Congreso de los Diputados. Lo rechazó la abrumadora mayoría (313 de los 350 diputados). "Lo que está en cuestión esta tarde no es si aprobamos o no determinado documento, sino si en España se aplica la ley", dijo entonces Rajoy, al frente de la oposición.
El último cartucho que intentó quemar Ibarretxe fue el de una "consulta popular". El "lehendakari" quiso preguntar en 2008 sobre un diálogo con ETA y una negociación sobre el "derecho a decidir del pueblo vasco". El gobierno socialista recurrió ante el Constitucional y este la frenó.
En 2009, Ibarretxe volvió a ganar las elecciones vascas pero sin mayoría absoluta. Y el respaldo del PP al socialista Patxi López permitió la proclamación de este como nuevo jefe de gobierno vasco. Desairado y contrariado, Ibarretxe anunció su retirada de la política en pleno debate de investidura del socialista.
A partir de ahí, el independentismo en el País Vasco inició un declive que culminó con el alto fuego definitivo de ETA en 2011, tras más de 60 años y más de 800 asesinados en su pretensión de lograr la independencia de la región del resto de España.
Ahora, el País Vasco mira con distancia el proceso catalán. El "lehendakari" Iñigo Urkullu, del PNV, llegó al poder a finales de 2012 y se apartó de la vía rupturista, apostando por una salida pactada con el Estado a las demandas de más autogobierno.
La distancia que Urkullu mantiene con Artur Mas se pudo ver en junio, en la final de la Copa del Rey de fútbol. Sonaba el himno nacional de España en el Camp Nou y miles de aficionados del Barça y del Athletic de Bilbao pitaron los acordes y al rey Felipe VI.
El jefe del Ejecutivo catalán sonrió ampliamente en el palco presidencial. Al otro lado del monarca, el "lehendakari" mantuvo el gesto serio durante el estruendo.
Enric Juliana, director adjunto del diario catalán "La Vanguardia", hablaba hace unos días del "oasis vasco", al comparar los impulsos secesionistas en la actualidad en una y otra región. "Catalunya les sorprende, les preocupa y les inquieta (a los vascos)", escribió.
Cataluña, una de las regiones más ricas de España
Cataluña, en el noreste de España, es una de las regiones más ricas del país. Su economía supone en torno a un 18.5 por ciento de la nacional. Por PIB per cápita, en 2014 ocupó el cuarto lugar, tras Madrid, el País Vasco y Navarra.
Sin embargo, también es una de las regiones más endeudadas del país. El gobierno catalán lo atribuye a que una gran parte de lo que el Estado recauda en impuestos no lo reinvierte allí, sino en las regiones más pobres.
Con más de 7.5 millones de habitantes, es la segunda región española más poblada, después de Andalucía, aunque su superficie -cerca de 33.000 kilómetros cuadrados- es casi tres veces menor a la de la comunidad autónoma del sur.
Barcelona, la segunda ciudad de España, es su capital. Allí están el Parlamento regional y el gobierno catalán.
Cataluña es una de las cuatro comunidades autonómas históricas de España, que son las que antes de la dictadura de Francisco Franco (1939-1975) habían iniciado un proceso para tener una norma básica para regir la vida de la región.
Junto a las otras tres -País Vasco, Galicia y Andalucía-, accedió por eso antes a un alto nivel de autonomía una vez aprobada la Constitución española de 1978. En virtud de esas competencias, por ejemplo, tiene una policía propia, los Mossos d'Esquadra.
Son lenguas cooficiales el español y el catalán, que es también una lengua románica. Su enseñanza estuvo prohibida durante la dictadura.
En la región nacieron artistas conocidos internacionalmente como los pintores Salvador Dalí, Joan Miró y Antoni Tàpies y el arquitecto Antoni Gaudí, autor del templo de la Sagrada Familia. El cantautor Joan Manuel Serrat, el tenor Josep Carreras y la soprano Montserrat Caballé también le dieron fama internacional.
El FC Barcelona es uno de los mejores equipos de fútbol del mundo y ha contribuido al conocimiento de la región española en el mundo.
Muchos catalanes se sienten diferentes del resto de los españoles por la historia, su tradición cultural y su identidad lingüística.
Siempre ha existido un sector independentista de la población. Pero fue en los últimos años, al calor de la crisis económica, cuando el deseo de una secesión del resto de España se volvió más fuerte, con un sector de la población que sostiene que viviría mejor en una Cataluña independendiente.
Cada 11 de septiembre celebra su fiesta oficial. Conmemora el 11 de septiembre de 1714, cuando las tropas borbónicas del rey Felipe V tomaron Barcelona en la Guerra de Sucesión y las instituciones catalanas fueron abolidas.
En los últimos años hubo manifestaciones multitudinarias en esa fecha reclamando un referéndum de autodeterminación y la independencia.
Principales hitos del proceso soberanista en Cataluña
Los ciudadanos de Cataluña están llamados a votar el domingo en unas elecciones anticipadas que el jefe del gobierno regional quiere que sean un plebiscito independentista. A continuación, los principales hitos del proceso soberanista:
- 29 de junio de 2010: El Tribunal Constitucional español declara ilegales 14 artículos del nuevo Estatuto de Autonomía de Cataluña, la norma básica de la región, entre ellos el que la concibe como "nación". Muchos catalanes ven en esta decisión una agresión y piden la ruptura con el Estado español.
- 11 de septiembre de 2012: Primera gran manifestación en Cataluña a favor de la independencia. Según las estimaciones, 1,5 millones de catalanes salen a la calle en Barcelona en una marcha sin precedentes con motivo de la Diada, fiesta oficial de la región.
- 20 de septiembre de 2012: El presidente del gobierno español, Mariano Rajoy, rechaza la petición del jefe del Ejecutivo catalán, Artur Mas, para negociar un pacto fiscal con una financiación preferente para Cataluña que permita a la región recaudar y gestionar los impuestos con una agencia tributaria propia.
- 25 de septiembre de 2012: Artur Mas anuncia comicios anticipados en Cataluña con la intención de abrir un proceso soberanista en caso de recibir el apoyo de los ciudadanos en las urnas.
- 25 de noviembre de 2012: Se celebran en Cataluña comicios anticipados. La coalición que lidera Mas, CiU, pierde 12 escaños y no consigue mayoría absoluta. Llega a un pacto de gobierno con los independentistas de Esquerra Republicana (ERC), que doblan sus escaños y se convierten en la segunda fuerza política.
- 24 de diciembre de 2012: Artur Mas toma posesión como jefe de gobierno y anuncia un referéndum independentista en 2014.
- 11 de septiembre de 2013: Una multitudinaria cadena humana de 400 kilómetros atraviesa Cataluña reclamando la secesión de la región bajo el lema "Vía catalana hacia la independencia".
- 12 de diciembre de 2013: Artur Mas anuncia la fecha y las preguntas del referéndum de autodeterminación tras llegar a un acuerdo con los partidos soberanistas. Lo fija el 9 de noviembre de 2014 con las preguntas: "¿Quiere usted que Cataluña sea un Estado?" y, en caso afirmativo, "¿quiere que sea independiente?". El gobierno de Rajoy advierte de que la consulta es inconstitucional y asegura que no se celebrará.
- 11 de septiembre de 2014: Decenas de miles de personas vuelven a la salir a la calle en Cataluña con motivo de la Diada para pedir un referéndum de autodeterminación a dos meses de la fecha fijada para celebrar la consulta soberanista.
- 19 de septiembre de 2014: El Parlamento catalán aprueba una ley de consultas que pretende dar amparo legal al referéndum independentista del 9 de noviembre.
- 27 de septiembre de 2014: Artur Mas firma el decreto de convocatoria del referéndum soberanista de cara al 9 de noviembre en un acto institucional celebrado en la sede del gobierno regional, el Palau de la Generalitat de Barcelona.
- 29 de septiembre de 2014: El Tribunal Constitucional español suspende cautelarmente la consulta catalana y la ley de consultas al admitir a trámite, en tiempo récord, el recurso interpuesto horas antes por el Ejecutivo de Rajoy.
- 30 de septiembre de 2014: Miles de personas protestan en Cataluña por la decisión del Constitucional y piden un referéndum.
- 12 de octubre de 2014: Miles de personas se concentran en el centro de Barcelona con motivo del Día de la Hispanidad a favor de la unidad de España y Cataluña.
- 14 de octubre de 2014: Artur Mas confirma que renuncia al referéndum suspendido por el Tribunal Constitucional y anuncia la convocatoria de una nueva consulta no oficial para el 9 de noviembre como posible antesala de unas elecciones en clave plebiscitaria.
- 4 de noviembre de 2014: El Tribunal Constitucional admite también a trámite el recurso interpuesto por el gobierno de Rajoy ante la consulta simbólica anunciada por Mas y la suspende cautelarmente, al igual que ocurrió con el primer referéndum convocado. El gobierno catalán desafía a Madrid y anuncia que la celebrará.
- 9 de noviembre de 2014: Más de dos millones de personas (de los 5,4 millones llamadas a las urnas) acuden a votar en la consulta no oficial. El 80 por ciento se pronuncia a favor de la independencia.
- 14 de enero de 2015. Artur Mas anuncia elecciones anticipadas en Cataluña el 27 de septiembre, con el objetivo de que se conviertan en un plebiscito sobre la independencia.
- 15 de julio de 2015: Tras una ardua negociación, los dos partidos mayoritarios de Cataluña, el de Artur Mas (CDC) y ERC, acuerdan concurrir en una lista unitaria independentista a las elecciones del 27 de septiembre. Cuentan con el apoyo de colectivos civiles soberanistas como la Asamblea Nacional Catalana (ANC) y Òmnium Cultural. La lista está encabezada simbólicamente por independientes pro secesión, aunque el candidato a la jefatura del gobierno catalán sigue siendo Artur Mas, que va el cuarto.
- 11 de septiembre: Diada. La campaña de las elecciones catalanas arranca con una gran manifestación en Barcelona a favor de la independencia de la región. Es la cuarta gran demostración de fuerza del secesionismo en cuatro años.