Turismo alternativo para fin de año
Haz algo diferente ve a un pueblo mágico, viaja por ríos, disfruta del temazcal, sal de la rutina
México DF.- Te proponemos despedirte del 2015 con un festejo poco convencional. Cambiamos el confeti por mariposas monarca y los manteles largos por arena y lava petrificada.
Para el último día del año elegimos cinco itinerarios que incluyen un abrazo de la naturaleza y, en algunos casos, cena y fiesta. Son viajes diseñados por “artesanos turísticos”, sabedores de cada rincón de su localidad. Ellos se convertirán en compañeros de ruta para hacerte apreciar el mundo desde un ángulo libre de pretensiones y lleno de aventuras.
Agua Blanca, Michoacán
> Los manantiales que brotan en medio de una cañada llenan las piscinas del hotelito ecológico Agua Blanca, ubicado a dos horas y media del DF. En el último día del año se organiza una caminata en el bosque para ver las iguanas y murciélagos que habitan una zona alimentada por tres cascadas. En la caída de agua de 30 metros de altura, prepárate para descender a rappel.
La fiesta de Año Nuevo no debe iniciar si no has renovado tu energía. Si quieres darle un sentido espiritual a la experiencia, participa en una ceremonia de temazcal y agradece a la Madre Tierra lo brindado durante 365 días del año.
Después de la cena y para los que no se quieran quedar al baile, se emprende otra caminata, esta vez hacia un riachuelo iluminado por peces que brillan en la oscuridad.
Al día siguiente visita El Rosario, uno de los seis santuarios (y el más grande) de la mariposa monarca. El mediodía es la mejor hora, cuando más de 140 millones de mariposas revolotean en el bosque en busca de agua
Tlacotalpan, Veracruz
> Llegar a la tierra de Agustín Lara es enamorarse del son jarocho, de las fachadas coloridas, las calles adoquinadas y de los paseos en bicicleta. Por eso, el día 30, el centro histórico de este pueblo, declarado Patrimonio de la Humanidad, se recorre en dos ruedas.
a caravana de bicicletas se aventura por las calles que esconden talleres de laudería. Se hace una parada para apreciar cómo los artesanos crean instrumentos de cuerda a partir de un trozo de madera. Después, van a casa de doña Panchita y prueban sus famosos dulces de leche.
Al final, con torito en mano, escuchan historias en la cantina Blancanieves donde “El Flaco de Oro” se inspiraba con un par de alipuses.
Al día siguiente navega el Papaloapan. Hay que esperar a que el campo de béisbol abra sus puertas para la quema del ‘Año Viejo’, representado por una piñata de forma humana, cargada con un arsenal de pólvora. Sigue con el festejo en el restaurante del hotel Posada Doña Lala.
El primer día de 2016 hay un paseo a Catemaco, en la zona sur del lago, para convivir con habitantes de la localidad de Benito Juárez. Recorre el sendero de las Cascadas Encantadas y aprende a elaborar aretes y pulseras con semillas.
Marquelia, Guerrero
> Imagina que estás en la playa elevando un globo de cantolla, esperando que eso que anhelas tanto se cumpla. Un camino de velas conduce a una palapa donde está lista la cena y la música para bailar. De pronto una tortuga golfina sale del mar, avanza despacio sobre la arena. Las olas rugen.
Levantas la vista y ya no es solo una, sino 15 quelonios buscando un lugar seguro para depositar más de 30 huevos. Así es como se vive la última noche del año en la costa guerrerense.
Todos los años el campamento tortuguero Guadalupe Bettina invita a los viajeros a convertirse en los guardianes de tortugas golfina y laúd, durante dos noches.
No solo se trata de verlas arribar a la playa, sino de monitorear los nidos. En cuanto a las crías, espera a que salgan por sí solas a la superficie de la arena, que se recuperen del esfuerzo y estén listas para su primer encuentro con el mar. Al día siguiente toma una clase de yoga al amanecer o da un paseo entre mangles para observar aves.
> El 31 de diciembre conquista la cima de este volcán. Por la tarde estarás en casa, preparado para recibir las 12 campanadas.
El guía pasa por ti a las puertas de tu hogar. Hay que madrugar porque la caminata comienza a las ocho de la mañana, en el punto exacto de los 4 mil metros de altura, hacia una de las nueve cumbres del Nevado, ya que su cráter está fracturado.
El camino al pico El Fraile (4 mil 680 metros) permite contemplar las lagunas de El Sol y La Luna, dos cuerpos de agua de color turquesa que nacen en el fondo de la montaña.
Subir a la cima toma aproximadamente entre dos a tres horas. Una vez que lo logras, ofreces un saludo a la Madre Tierra y recobras fuerza para regresar, ya sea por una ladera cubierta de arena o por una llena de rocas y desfiladeros.
Nevado de Toluca, Estado de México
> Es un reto escalar la cara sur del tercer monolito más grande del mundo (2 mil 510 metros de altura). Todos los caminos llevan a Las Capillas, a donde el común de los turistas llega a pie. Pero tu hazaña será trepar la peña, cual Hombre Araña, ayudándote de cuerdas y escaleras de metal.
En la cumbre se monta un picnic para saborear bocadillos con jamón serrano, quesos y vinos de Tequisquiapan. El regreso será emocionante: ¿qué tal un descenso a rappel
El hotelito Casa Tsaya Colonial ofrece cena y baile. La tarifa por habitación es de mil 100 pesos. La cena cuesta 700 pesos por persona .
