Tim Cook, el hombre que renovó la imagen de Apple

Puede que el director ejecutivo de Apple desde 2011, Tim Cook, no tenga el carisma de su legendario predecesor Steve Jobs, pero el empresario de 55 años ha logrado dejar su huella e implantar con éxito cambios en una de las empresas tecnológicas más grandes del mundo.

Pese a que en su momento muchos consideraban a Jobs el único capaz de mantener a la empresa en la cima, desde que Cook está al cargo la compañía presta más atención a los aspectos ambientales, a la protección de datos y a las condiciones laborales de los trabajadores de sus proveedores.

Y mientras los accionistas de la compañía se llenan los bolsillos, la transparencia, que brillaba por su ausencia en la era Jobs, también ha aumentado.

Y Cook, de 55 años, se ha atrevido incluso a mantener una confrontación directa y pública con el Gobierno de Estados Unidos, durante la investigación de los atentados de San Bernardino, donde un tribunal exigió a la compañía que desarrollara un software para desbloquear el teléfono del presunto terrorista - un iPhone - para acceder a sus datos.

Su estreno como CEO de Apple en 2011 levantó cierto escepticismo: a pesar de que se había ocupado anteriormente del negocio cotidiano de la empresa e incluso representado a Jobs en repetidas ocasiones durante las ausencias motivadas por su enfermedad, no estaba considerado un visionario de los productos como Jobs.

Pero Cook no intentó desde el primer momento ocupar todo el espacio dejado por el fallecido Jobs, sino que delegó muchas responsabilidades en el diseñador jefe de Apple, Jony Ive, y otros altos directivos.

Y el iPhone 6 ha demostrado que también bajo las órdenes de Cook la compañía es capaz de fabricar dispositivos exitosos.

El propio Jobs fichó a Cook en 1998, cuando éste trabajaba como gerente de IBM y Compaq, que en aquel momento luchaban por mantenerse a flote. El fichaje dio frutos muy pronto.

El estadounidense cerró fábricas propias y aumentó la subcontratación. Redujo el stock de la compañía de meses a días, y minimizó la cadena de suministradores. La revista estadounidense "Fortune" incluso describió a Cook como "el genio detrás de Steve".

Sobre su esfera privada apenas se sabe nada. En otoño del 2014 hizo pública su homosexualidad, convirtiéndose así en el primer CEO de una gran compañía estadounidense abiertamente homosexual.

Hace poco anunció que donaría toda su fortuna después de pagarle la universidad a su sobrino.