Presidente catalán convocará referéndum de independencia en 2017

El presidente de Cataluña, Carles Puigdemont, anunció hoy que convocará un referéndum de independencia en septiembre del año que viene, momento en el que esta región española estará lista para la "desconexión" de España.

El político, que se enfrenta hoy a una cuestión de confianza en el parlamento catalán, aseguró que no escatimará esfuerzos para seguir con su plan unilateral para convertir a Cataluña en un Estado independiente.

"La resolución de la demanda catalana se hará de esta manera: o referéndum o referéndum", dijo el líder independentista, quien apuntó que quiere una consulta pactada, pero que si no se consigue se buscará la fórmula para llevarla a cabo.

Así, si el Parlamento catalán le da su apoyo mañana en la votación, continuará con la hoja de ruta hacia la independencia que inició tras ganar las elecciones regionales celebradas hace un año en la región.

Está previsto que mañana, cuando intervendrán el resto de partidos y se realizará la votación, el político conseguirá superar esta moción, ya que el partido independentista Candidatura de Unidad Popular (CUP) ha anunciado que le dará su apoyo.

Por tanto, tras el sí de la cámara le encargará a los vicepresidentes de la región que diseñen y organicen la consulta popular y seguirá adelante con las reformas de las instituciones locales para que en junio de 2017 la región esté preparada "para desconectar del Estado español con plenas garantías".

Puigdemont tuvo duras palabras para la CUP, un partido independentista de corte anticapitalista, a quienes les advirtió de que si no aprueban con su voto los presupuestos de la región convocará elecciones anticipadas. Este partido ya frustró la tramitación de las cuentas de 2016, motivo por el cual Puigdemont acabó presentándose a esta cuestión de confianza.

Desde que el independentista llegó a la presidencia, se han dado algunos pasos hacia la creación de un Estado independiente pero el Gobierno español del conservador Mariano Rajoy los ha impugnado todos ante los tribunales. En este sentido, Puigdemont acusó hoy al Tribunal Constitucional de ser el "brazo armado" del Estado para impedir los deseos del pueblo catalán.

Mañana por la mañana arranca el debate y por la tarde tendrá lugar la votación. Puigdemont aseguró que está dispuesto a "asumir las consecuencias de la decisión del Parlamento". Además, pidió que sea la decisión que sea "sea respetada con la misma actitud democrática", ya que "ninguna postura tiene más legitimidad o menos".

El desafío del líder de Cataluña, región de 7.5 millones de habitantes situada en el noreste español, se está produciendo en un momento político muy complicado para España, en pleno proceso de negociación de Gobierno y tras nueve meses de bloqueo.

En su discurso el presidente catalán también tuvo palabras críticas a la actual situación y dijo que la posible celebración de unas terceras elecciones y el bloqueo político es una muestra de que "el Estado claramente ha ido a peor".