Padece la selección inglesa una crisis sin fin
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Medios, hinchas, jugadores y ex futbolistas coinciden hoy en su indignación, su pesimismo y sus críticas a la decadente situación de la selección, que a su ya crónica falta de éxitos deportivos
Si la eliminación de la Eurocopa ante Islandia fue ya un duro golpe, la selección inglesa de fútbol parece haber tocado definitivamente fondo con la escandalosa salida de su entrenador Sam Allardyce.
Medios, hinchas, jugadores y ex futbolistas coinciden hoy en su indignación, su pesimismo y sus críticas a la decadente situación de la selección, que a su ya crónica falta de éxitos deportivos suma ahora una gran mancha fuera de la cancha.
"Pensaba que la Eurocopa había sido el punto más bajo de todos los tiempos para Inglaterra... Espero que esto sea el fondo", señaló en Twitter el ex delantero Alan Shearer, que en declaraciones a la BBC no dudó en calificar a Inglaterra como "el hazmerreír del fútbol mundial". Y Rio Ferdinand, otro histórico de los "Three Lions", señaló que la situación de Inglaterra ya "se ha vuelto cómica".
La destitución de Allardyce después de 67 días en su cargo supone un duro golpe en el proceso de reconstrucción que buscaba la Federación Inglesa (FA) tras la Eurocopa y la humillante caída ante Islandia en los octavos de final.
El entrenador llegó después de que los directivos pagaran una indemnización millonaria al Sunderland, equipo al que dirigía hasta hace unos meses, para hacerse con sus servicios. Sin embargo, el técnico sólo dirigió un encuentro, la victoria sobre Eslovaquia en el inicio de las eliminatorias al Mundial de Rusia 2018.
"No creo que alguien pueda superar alguna vez su porcentaje de victorias", dijo irónico el ex futbolista Gary Lineker en Twitter.
La prensa inglesa dedicó hoy titulares de catástrofe a la salida del entrenador y vaticina un futuro sombrío para una selección cuyo único título importante se remonta al Mundial que organizó en 1966. Una maldición que el crecimiento de la poderosa Premier League no ha cambiado en absoluto.
"Este es el punto más bajo del fútbol inglés, es hora de reconocerlo", señaló "The Times" con una imagen de Allardyce llevándose las manos a la cabeza.
"SÁLVANOS GARETH", título con mayúsculas el "Daily Star" aludiendo a Gareth Southgate, quien asumirá interinamente la conducción de la selección mientras se busca un técnico definitivo.
Pero como si no hubieran suficientes problemas, el diario "The Telegraph", el encargado de provocar la salida de Allardyce con su cámara oculta, prometió hoy más revelaciones sobre manejos irregulares de entrenadores del fútbol inglés en los próximos días.
Según el periódico británico, ocho entrenadores y ex técnicos de la Premier League habrían recibido pagos ilícitos en el marco de operaciones de traspasos de jugadores. La información se basa en testimonios de agentes de los futbolistas.
Una cámara oculta de "The Telegraph" provocó el martes el despido de Allardyce, quien fue filmado mientras dialogaba con periodistas que se hicieron pasar por inversores sobre cómo eludir las normas de la Federación Inglesa relativas a la propiedad de los pases de jugadores por parte de terceros.
El experimentado entrenador, fulminado inmediatamente de su cargo, lucía hoy apesadumbrado en la entrada de su casa en la ciudad de Bolton.
"Fue un error de mi parte y he pagado las consecuencias. La trampa ganó en esta ocasión y debo aceptarlo", indicó el técnico, que dejará de momento Inglaterra y partirá al extranjero para descansar y reflexionar.
"Me voy afuera a reflexionar", dijo en su breve diálogo con los medios. Su caso, sin embargo, podría no ser el último.
