Llega dos años después ayuda de Sedesol a Coahuila... y menos de la mitad de lo prometido

La Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol) delegación Coahuila entregó ayer el apoyo de Empleo Temporal que habían solicitado ejidatarios mediante el dirigente Estatal de la Coordinadora Nacional Plan de Ayala (Cempa) desde hace dos años.

Roberto Martínez Daniel, dirigente estatal de la Coordinadora, detalló que además del retraso, hubo una disminución de más de la mitad del recurso que habían gestionado inicialmente, que era de 350 mil pesos. 

“La propuesta original se hizo hace 2 años, por cuestiones de presupuesto se han venido postergando. Los montos originales eran mayores, al inicio estábamos hablando de 350 mil pesos, pero nos van a dar unos 134 mil, de los cuales 100 mil pesos son para el pago de jornales para 47 personas”, manifestó. 

El delegado de Sedesol en Coahuila, Joel Nochebuena Hernández, informó que ayer se entregaron 36 apoyos de pintura para arreglos de fachadas de una comunidad de Arteaga, además de un apoyo por familia de 2 mil 100 pesos; la inversión general es de 96 mil pesos.

Añadió que se entregaron otros 36 apoyos de Piso Firme a la organización Cempa, que ayudará a 36 familias de varios ejidos de Saltillo, para lo que se invirtieron 134 mil pesos. 

“Cempa es una organización que no ha recibido ningún apoyo. Nosotros fuimos, visitamos esas familias y nos dimos cuenta que necesitan el apoyo porque tienen piso de tierra. La idea es atender a las organizaciones, pero el objetivo que yo tengo es verificar que realmente lo necesitan”, explicó Nochebuena.

Por su parte, Martínez Daniel informó que las comunidades que se verán beneficiadas son el ejido Cuautla, La Majada, el ejido La Tinaja y la localidad La Parcela.

“Afortunadamente al fin del día salió algo que ayuda porque tenemos que ser muy claros, la problemática no sólo es en nuestra región, sino en todo el Estado, no hay recursos para que se puedan atender las cuestiones de pisos firmes, techos o fachadas”, sostuvo.

Expresó que en todas las regiones rurales del Estado hay problemas, pues con cualquier “aguacero” se caen los techos de sus casas, que son construidos de tabla o morillo.