¿Juventud perdida? 2/2

Ya no hace falta esperar un largo mes, como lo hacía yo en mis mocedades, para ir al kiosco más cercano, ver en los anaqueles la última revista “Playboy” y deleitarnos con los cuerpos femeninos semidesnudos los cuales me hacían sudar y palidecer. Musas de papel. No más. Hoy, sólo hace falta encender o ver el celular “inteligente” y de última generación, para ser literalmente bombardeado por videos, animaciones, cortos, y hartas, hartas fotografías no de modelos denudas (es propio de las cavernas que sigo habitando) sino de sexo fuerte, demencial, más que explícito. 

¿Tiene usted un hijo o hija adolescente e incluso, niños? Asómese un día a sus cuentas, computadoras y móviles para que descubra sus “tareas” y en que pierden el tiempo. Vaya, ojalá fuese eso, perder el tiempo. No, lo que ven altera sus conductas, los modela al ser tabla rasa y de plano, los modifica. No siempre para bien. Hoy ya no hace falta esperar un largo mes para esperar la revista de míster Hugh M. Hefner; ahora el sexo rudo es diario y a toda hora. Me puse nostálgico y repasé algunas de mis avinagradas revistas. Tengo la de Paula Sladewski, Jasime Fiore, Elisa Bridges, La Toya Jackson; como no tener las ediciones de Anna Nicole Smith; poseo las ediciones especiales de mi eterna Marylin Monroe y haciendo eco de que el producto mexicano es bueno, tengo a Lourdes Munguía, “La Vecina” que luce de rechupete, dos nietas de Porfirio Díaz en cueros; en fin, eran tiempos mejores.  

Y no puedo dejar de escribirlo, ser bella al parecer, tiene su propia maldición. De las anteriores señoritas que nombré, al menos cinco de ellas murieron de causas extrañas, sino es que violenta y sádicamente, antes de los 50 años. ¿Es la maldición “Playboy”? No es el caso de esta columna entrar en esta hondura, pero hay 19 “conejitas” que han muertos en condiciones terribles luego de ser nombradas y admiradas como conejitas en la revista por antonomasia para caballeros. Es lo que ahora conocemos como feminicidios. Muertas por su condición de ser mujeres, así de simple. Y feminicidios y violencia contra y entre las mujeres es lo que sobra en Coahuila. A la par de sexo, harto sexo entre las niñas. ¿Juventud perdida? El Estado muestra ya un tejido social podrido mientras los dos principales candidatos a la Gubernatura del Estado, Miguel Riquelme (PRI) y Guillermo Anaya (PAN), sin comprometerse en nada en lo absoluto, hacen promesas tan vagas y políticamente correctas, que emulan aquella muletilla: salvemos el hábitat del oso panda, estoy en contra del calentamiento global y hay que salvar los arbolitos de Zapalinamé.  

Esquina-bajan
VANGUARDIA dio la nota. El 16 de febrero se dictó sentencia en Monclova al menor Javier (13 años en ese entonces, apodado “El Demonio”) quien mató de 30 puñaladas a su “novia”, una niña esmirriada de 11 años, Diana. Es culpable, pero apenas va estar cinco años en el centro de salud mental. Luego, en la calle. La madre, Blanca Estrada, pide cuando menos 40 años de prisión para el asesino. ¿Matar por celos a los 13 años? sí. ¿Cuántas puñaladas necesita un ser humano para morir, máxime como el enjuto cuerpo de la niña? No lo sé. Pero en este caso, fueron 30. La “cosió” a cuchillo. 

En ese tiempo del atroz crimen, recuerdo que el avispado reportero de los medios electrónicos, Sergio Alvizo, realizó una serie esplendida de trabajos al respecto. Me fue avisando de sus entrevistas y su tarea de investigación. Pero la pregunta era la misma y claro, no hay una única respuesta: ¿qué pasa en Coahuila, que aires malsanos se están cebando en nosotros y porque los niños y jóvenes están más ciegos y perdidos que nunca? La madre de la niña, Blanca Estrada, exige 40 años de prisión mínimo. Al niño le van a dar sólo cinco años. Recuerdo entonces las palabras de un escritor norteamericano, William Gaddis: “¿Justicia? Se obtiene justicia en el otro mundo. En este, usted tiene la ley.” Esto es Coahuila. 

Este es el Coahuila podrido que nadie quiere ver ni abordar en sus discursos políticamente correctos. Todo está viciado. Alumnas (12-14 años) de la Secundaria Oscar Flores Tapia No. 73, se enfrascan cuatro veces a la semana en peleas. “Las Sureñas” contra “Las Nenas”, se hacen llamar las bandas en pugna. Se videograban y las peleas inundan la red. Niñas de una secundaria venden sus anoréxicos cuerpos a 100 varos… En Torreón, los feminicidios en los dos primeros meses del año fueron el terror diario. Incluyendo la muerte por motivos de rito satánico, de una niña (Jessica Valeria) de apenas 15 años… En la Secundaria Federico Berrueto Ramón, como en decenas y cientos del Estado, las peleas entre jovencitas son pan diario y se intercambian los videos en redes sociales. Coahuila es el 1er lugar nacional de embarazos de niñas (14-16 años)…

Letras minúsculas
Este es el Coahuila actual. Pero Riquelme y Anaya andan salvando el hábitat del oso panda. Pinche vida.