Jubileo de la misericordia
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¿A qué le llaman misericordia?
Cuanta denuncia llegaba al cardenal Joseph Ratzinger, Benedicto XVI, cuando era secretario particular del Papa Juan Pablo II, respondía a las víctimas: “el Santo Padre tiene en gran estima al padre Marcial Maciel”.
El primer peregrinaje que realizó Juan Pablo II fue a su tierra natal, Cracovia. A su paso una señora mayor le dice en voz alta: “ora por la Iglesia del silencio”. A lo que responde: “ya no hay iglesia del silencio, ahora tiene la voz del Papa”.
En un contexto histórico donde Juan Pablo II sentía su deber salvar a su País, Polonia, del yugo comunista e impulsar hasta instalar al católico Lech Walesa, líder del sindicato electricista, como primer Presidente electo democráticamente. Quedó sellada y cumplida esa promesa.
Luego seguiría derribar el Muro de Berlín y lo logró, moviendo todo su poder diplomático, político y económico. Y el río de dinero que la orden Regnum Cristi (Reino de Cristo) capta, cayó como anillo al dedo al papado de Juan Pablo II. Por eso Marcial Maciel fue intocable y sus legionarios también.
Según el comunicado de la Penitenciería Apóstólica, los Legionarios podrían alcanzar la indulgencia plenaria si renuevan por devoción sus compromisos que los vinculan al Movimiento o a la Legión, y rezan por la fidelidad de su patria a su vocación cristiana por las vocaciones al sacerdocio y la vida consagrada y por la defensa de la familia.
Y sigue la mata dando; el fin justifica los medios y poderoso dios es don dinero. El Papa Francisco otorga indulgencia plenaria a los Legionarios de Cristo involucrados con motivo del “jubileo” por el 75 aniversario de vida de la congregación. Su fundador, Marcial Maciel, pederasta que arruinara la vida de miles de niños en más de una docena de países y, además abusó de sus propios hijos biológicos.
Reino de Cristo. Penitenciería Apostólica. Jubileo (¿de qué hay que tener júbilo? Indulgencia Plenaria — resulta que ya son querubines— la pederastia clerical aumenta impunemente para la ruina existencial de infantes y adolescentes inocentes que a la Madre Iglesia, no le importan. 2016 Año de la Misericordia…
¡Por Dios! Cada vez que se abandona a una víctima, se premia a un criminal. El pez se pudre por la cabeza. Vaya símbolo.
¡Decídete a ser feliz hoy!
@_A_lfonsina