Fue Carlos Chávez uno de los puntales del nacionalismo musical
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El primer concierto público de su música ocurrió en 1921, con la ejecución de su Sexteto para cuerdas y piano.
Figura fundamental del movimiento musical nacionalista en este país y fundador de la Orquesta Sinfónica de México, el compositor y director de orquesta Carlos Antonio de Padua Chávez y Ramírez es recordado hoy al cumplirse 117 años de su muerte.
Carlos Chávez nació el 13 de junio de 1899, en Popotla, cerca de la Ciudad de México, donde creció bajo el cuidado de su madre Juventina, quien era directora de la Escuela Normal de Jóvenes Mujeres de Popotla.
Fue el más pequeño de seis hermanos y cuidado desde muy chico únicamente por su madre, quien enviudó cuando Chávez solo tenía cinco años.
De acuerdo al portal “biografíasyvidas.com”, a los nueve años empezó a tomar clases de piano junto a su hermano Manuel y estudió brevemente con Asunción Parra y con Manuel M. Ponce (1882-1948), principal compositor mexicano de aquel tiempo.
Poco después de iniciar sus estudios de piano, Chávez empezó a componer, escribió algunas piezas sencillas, y a los 12 años el joven músico sabía leer y estudiar partituras orquestales de destacados compositores.
Durante la Revolución Mexicana (1910), su familia se trasladó a Veracruz, no obstante, al término del movimiento armado regresó a la Ciudad de México, señala la biografía del compositor disponible en su sitio oficial en Internet.
Chávez nunca intentó convertirse en discípulo de otro compositor, sino que recurrió a sus propios análisis de las obras de los clásicos, sin embargo, completó sus estudios formales en el Conservatorio Nacional y se diplomó en composición.
En 1920, la firma Wagner y Levien, en Ciudad México, publicó algunas de sus primeras composiciones para piano, creando así las condiciones para darlo a conocer al mundo.
El primer concierto público de su música ocurrió en 1921, con la ejecución de su Sexteto para cuerdas y piano, la presentación fue bien recibida y el nuevo gobierno revolucionario no tardó en comisionarle la composición de un ballet basado en antiguos temas aztecas.
Chávez incorporó muchos temas indígenas que recordaba de sus primeros intentos por crear un trabajo orquestal con sonoridad distinta, y que fueron de importancia seminal para sus composiciones futuras.
Por desgracia, la obra fue rechazada por Julián Carrillo, director de la Orquesta Sinfónica Nacional, y permaneció inédita hasta 1928, cuando fue estrenada por la Sinfónica, dirigida por el mismo Chávez.
De acuerdo con la biografía de Chávez publicada en el portal “conaculta.gob.mx”, el compositor mexicano dirigió por 21 temporadas, a la OSM, con quien presentó 267 conciertos, en los que se estrenaron piezas de más de 83 destacados compositores internacionales.
En 1922 Carlos se casó con la pianista Otilia Ortiz, juntos se fueron de gira por Europa y se esforzaron por difundir las composiciones musicales de Chávez.
Mientras visitaban París, Chávez se hizo amigo del compositor Paul Dukas (1865-1935), quien lo alentó para que se concentrara en la rica herencia musical de México, de la misma manera como Falla había hecho con la música española, y Bartók y Kodaly con la música folclórica de Hungría.
De regreso en México para el nacimiento de Anita, su primera hija, Chávez organizó conciertos de música contemporánea en la Escuela Preparatoria Nacional, y promocionó muchos trabajos que, hasta entonces, no habían sido escuchados en México.
Entre los compositores cuyas obras fueron interpretadas, estaban Bartók (1881-1945), Honegger (1892-1955), Milhaud (1892-1974) , Satie (1866-1925) , Schoenberg (1874-1951) y Stravinsky (1874-1951) , así como el mismo Chávez.
La orquesta fue reorganizada y cambió su nombre a Orquesta Sinfonía de México; la orquesta floreció durante las 21 temporadas en que Chávez fue su director, y se convirtió en la primera orquesta estable en la historia de México.
Chávez también fue designado director del Conservatorio Nacional, donde enseñó composición e inspiró a nuevas generaciones de compositores musicales, como Candelario Huizar, Silvestre Revueltas, Daniel Ayala, Blas Galindo, Salvador Contreras y José Pablo Moncayo.
A lo largo de su carrera, Carlos Chávez creó un catálogo conformado por más de 200 composiciones, de entre las destacan: “Caballos de vapor” (1926-1932); “Sinfonía No. 2, India” (1935-36) y “Xochipilli Macuilxoxhitl, Una música azteca imaginaria” (1940), esta última pieza le fue encargada para la exhibición de arte mexicano en el Museo de Arte Moderno de Nueva York.
Otras de sus importantes obras son: “Concierto para violín” (1948-1950); las “Sinfonía No. 3” (1951), “Sinfonía No. 6” (1961), “En Invención” (1958), “Resonancias” (1964), “Elatio” (1967), “Discovery” (1969) e “Initium” (1971).
Carlos Chávez murió el 2 de agosto de 1978, su muerte ocurrió mientras visitaba a su hija Ana en Coyoacán, en la ciudad de México, falleció tranquilamente en la tierra natal a la que rindió tantos honores en su voluminosa obra.
