Este es el precio de ser una princesa…
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En ocasiones la presión social las lleva a poner en peligro su bienestar
El precio de ser princesa, más allá de tener que ver con aspectos económicos, involucra una gran presión social y psicológica que genera graves problemas a las mujeres de la monarquía.
El hecho de ser una figura pública que representa a la nobleza de un país ocasiona, principalmente a las mujeres, una responsabilidad absoluta de brindar una imagen estéticamente bella; por ese motivo suelen caer en problemas relacionas con desórdenes alimenticios.
Un reporte publicado por la Organización National Eating Disorders señala que un trastorno alimenticio puede ser provocado por factores psicológicos, como baja autoestima y sentimientos de falta de control de la vida, o bien por factores sociales que incluyen presiones culturales por la glorificación de la delgadez y el cuerpo perfecto.
Hablando concretamente de la corona inglesa, el caso con mayor fuerza mediática fue el de la princesa Diana, de quién se supo que tuvo problemas de alimentación provocados por la soledad en la que vivía en el palacio real, el rechazo de la reina Isabel y las infidelidades de su esposo el príncipe Carlos.
Ahora pareciera que estos pasos de trastornos alimenticios los está viviendo la Duquesa de Cambridge, Kate Middleton, pues según una publicación del periódico estadounidense The National Enquier, pesa tan sólo 45 kilos.
Esta es una noticia alarmante para sus familiares, pues la Duquesa mide 1.75 metros y su peso debería rondar los 63 kilos.
Con esto se comprueba nuevamente que el precio de ser princesa daña fuertemente la salud de sus representantes, y que este aspecto no se cambiará hasta que los estrictos prototipos a los que son obligados no sean modifiquen.
Por salud180.com
