“Estaba emocionado para este año, pero ya no”: Banqueros bajan sus expectativas en “Era Trump”
Diversos grupos de presión bancarios se verán afectados por reciente legislación
Grupos de presión bancarios comenzaron la administración del Presidente Donald Trump con grandes expectativas por reformas regulatorias, ahora afrontan una decepción tras la reescritura de la legislación Dodd-Frank.
Los banqueros dicen que afrontan la realidad de una legislación de desregularización bancaria se mantendrá en espera antes mayores prioridades como los planes de salud e impuestos.
“Es muy decepcionante” dice un representante industrial financiero “Estaba emocionado para este año, pero ya no”.
Aún si el Congreo llega a reescribir la ley Dodd-Frank – firmada por el expresidente Barack Obama - , es muy poco probable conseguir los votos suficientes en el Senado para una reforma impactante que esperaban los líderes industriales, dicen varios grupos de presión banqueros en entrevistas.
Los bancos afirman que la legislación Dodd- Frank que promovida como una respuesta a la crisis financiara, se encuentra “cojeando”. Las medidas que los bancos desean cambiar son las restricciones legales sobre el intercambio de propiedad, mejor supervisión de las instituciones más grandes de la nación, y restricciones capitales más severas.
Pero han encontrado poca esperanza para menor supervisión para agencia como la Reserva Federal o La Comisión de Bolsa y Valores bloqueados por la lentitud de las citas de Trump para estos organismos.
El abatimiento privado está en contraste con el mensaje positivo entregado a más de 1,500 banqueros en Washington esta semana en el Congreso. “Este año posee la más grande oportunidad que hemos tenido para ver acción en la necesitada regulación” dijo el presidente de la American Bankers Association, Rob Nichols durante una conferencia.
El Presidente del Comité Bancario del Senado, Mike Crapo, quien jugará un papel importante en la reforma regulatoria, ha enfatizado que el trabajo en el Senado anda con lentitud. Crapo anunció el día lunes que quería la opinión del público sobre las propuestas, subrayando el ritmo deliberado de los grupos de trabajo.
Además, el presidente republicano de la Cámara de Representantes en el Comité de Servicios Financieros, Jeb Hensarling aún debe actuar sobre su promovida reforma de la ley Dodd-Frank.
Los advocados de la industria han dicho que esperan que reguladores podrían avanzar más sin la acción del Congreso. Mas la administración Trump ha optado por nombrar a gente para puestos clave, como la de vicepresidente de la Reserva Federal para la supervisión.
Por ejemplo, la Reserva Federal podría relajar los procesos de testamentos aplicados para grandes bancos y determinar cómo podrían ser disueltos de ser necesario. Y la Comisión, así, podría actuar sobre las reglas en contra de las empresas.
Para estar seguros, es probable habrá más acción para ayudar a los bancos este año, aunque que sea más limitada que lo que esperaba el equipo bancario de la transición Trump, luego de que dijeran que un día después de la elección de noviembre se “desmantelaría” la ley Dodd-Frank.
Republicano del Congreso podrían atacar ciertas partes de la legislación, así como el obtenr control sobre la financiación de la Oficina de Protección Financiera del Consumidor – la cual fue creada para ayudar a proteger a las personas de fraude de hipotecas, préstamos estudiantiles y otros productos financieros – que eliminaría la necesidad del apoyo de los demócratas.
Los banqueros se dirigirán al Capitolio el jueves para dirigirse a James Ballentine, de la ABA, recalcando la necesidad de mantener coherencia entrwe los mensajes y las regulaciones sobre los bancos.
“Ninguna de estas cosas deberían ser temas de conversación cuando vas a encontrarte con los miembros del Congreso” advirtió Ballentine a la audiencia.
Éstos “competirán” junto acuses de espionaje de parte del presidente Trump, sondas del FBI, las audiencias de confirmación del Tribunal Supremo, un empuje al plan de salud, todo al mismo tiempo.