En un filme de animación tienes que crearlo todo: Peter Sohn

Peter Sohn debutó como director en los estudios de animación Pixar con el corto "Partly Cloudy", en el que a una sufrida cigüeña le tocaban los encargos más difíciles. Ahora, después de haber trabajado en numerosos proyectos de animación del estudio como "Los increíbles" y "Wall-E", está a punto de estrenar su primer largometraje, "The Good Dinosaur", que llegará a los cines de Latinoamérica a partir del 26 de noviembre.

"Un gran dinosaurio", de la que su director presentó un adelanto de media hora en el marco del Festival de Cine de Mar del Plata, cuenta la historia de Arlo, un pequeño apatosaurio de 11 años cuya vida cambia para siempre cuando muere su padre, al que era muy apegado.

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Un día, por accidente, es arrastrado por una corriente que lo aleja varios kilómetros de su hogar y que lo deposita en un lugar remoto y solitario, lejos de su madre y sus hermanos. Allí conoce a Spot, un niño pequeño que vive solo en el bosque, que aúlla como un lobo y camina en cuatro patas como un perro. Como muchas otras películas de Pixar, "The Good Dinosaur" reflexiona sobre el pasaje de la infancia a la adultez, de cómo un niño intenta encontrar al hombre en él. De visita en Mar del Plata, Sohn, nacido en Nueva York e hijo de padres coreanos, dialogó con dpa sobre su ópera prima:

dpa: ¿Qué diferencia a un director de cine de animación de un director de cine tradicional?

Sohn: "Creo que requiere de mucha paciencia. Los directores de animación tienen un enorme control sobre su mundo. Todo lo que ves, hasta la roca más pequeña, fue hecha por un artista. En las películas tradicionales buscas un lugar y lo fotografías; en animación tienes que crearlo todo. Porque al principio no hay nada: las montañas y los árboles no están ahí. Y darle vida a un personaje animado es cuadro por cuadro. No hay forma de captar nada y ponerlo en la película. También hay que ser muy perfeccionista".

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dpa: Y si algo no funciona supongo que es muy frustrante, porque en un punto todo depende de tu creación.

Sohn: "Es muy cierto. Los únicos dos aspectos más parecidos en animación a las películas tradicionales, en los que puedes captar algo de afuera, son las voces y la música. Puedes hacerle decir a un actor "¡Hey, Arlo!", y si te gusta como suena, lo captas. Hay quien ha dicho que la animación es como ver secarse una pintura: lleva mucho tiempo".

dpa: Si bien en animación hay que crearlo todo desde cero, en el caso de "The Good Dinosaur" hubo un desafío adicional, recrear un mundo extinguido como el de los dinosaurios. ¿Cómo lo hicieron?

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Sohn: "Fuimos a museos, hablamos con paleontólogos y observamos, por ejemplo, el esqueleto de un dinosaurio de cuello largo. Luego nos juntamos con artistas y empezamos a tirar ideas: 'Sus piernas parecen columnas de mármol, como las de los elefantes. Los tiranousarios rex, en cambio, son más bien como pájaros'. Arlo es un dinosaurio, por lo que se tenía que mover de una forma más parecida a la de un elefante. Pero los elefantes se ven muy fuertes, muy imponentes al caminar. Le dimos ese andar al padre, pero como Arlo debía verse más vulnerable, para sus movimientos nos basamos más bien en un camello, en esa torpeza que tienen para caminar, casi como de adolescente. Para Spot, el niño-perro, nos basamos más bien en ardillas, es decir, en animales que usan sus manos para comer. Ese en cuanto al aspecto. Luego debes encontrar el personaje, y eso lleva muchas investigaciones y conversaciones".

dpa: Usted dijo que podía identificarse con el miedo que siente Arlo porque al formar parte de una minoría, de niño también lo sintió. ¿Cuánto hay de ustedes en los personajes de Pixar?

Sohn: "Cuando era niño, los personajes de Disney no tenían raza, solían ser más bien animales, así que podía identificarme con ellos y eso fue una gran cosa para mí. En el caso de Arlo, pensé que sería muy divertido crear un personaje por el que pudiera sentir empatía. Esto es algo muy difícil que requiere de muchos experimentos, mucha prueba y error. Cuando trabajé en 'Finding Nemo' con (su director) Andrew Stanton, él no dejaba de decirme 'fracasa lo más rápido que puedas', que en realidad quiere decir 'sigue experimentando, trabaja hasta que encuentres algo que funcione'. Es duro porque implica terminar descartando cosas en las que has trabajado muy duro. Pero necesitas encontrar lo realmente auténtico de cada personaje. En Pixar, en general, trabajamos así: si un personaje tiene que enfrentar a su hermano, o a su padre, nos juntamos y compartimos experiencias del tipo 'yo hablaba con mi padre así', 'yo discutía con mi madre de esta forma'... Siempre tratamos de encontrar verdades de nuestras vidas y ponerlas en los personajes".

dpa: ¿Cómo saben qué divierte a los niños? ¿Testean mucho las películas con audiencias infantiles o apelan a su propia infancia?

Sohn: "Hay niños sabios, que parecen tener 40 ó 50 años, mientras que hay adultos que se sienten como si tuvieran 12 años. Creo que muchos de los adultos que trabajamos en Pixar somos bastante aniñados. Pete Docter (director de "Monsters Inc." y "Up", entre otras) es bastante parecido a un niño. Yo también sigo siendo un niño de alma. No testeamos nuestras ideas con niños todo el tiempo. Hay algunas proyecciones, pero confiamos bastante en nuestro instinto".

dpa: Esta es la primera vez que se estrenan dos películas de Pixar en un mismo año. Con el éxito de "Inside Out" tan cerca, ¿siente una presión extra?

Sohn: "La verdad es que estoy hace tanto en Pixar que ya son como mi familia. Estoy muy orgulloso de "Inside Out" porque gracias a ella puedo hablar con mi hija de cinco años acerca de las emociones de otra manera. No me siento presionado de forma competitiva, sino más bien espero que ellos también puedan estar orgullosos de lo que hicimos nosotros como miembros de esa misma familia.