Coahuila se suma a estados con “ordeña” de ductos de Pemex
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La pipa, color blanco, modelo 2014, marca Jost Internactional, con placas de circulación 672WV2, estaba “medio llena”, con aproximadamente 15 mil litros de combustible, y los saqueadores la tenían “conectada” a un ducto con una manguera
GENERAL CEPEDA, Coah.- Una pipa, con capacidad para 30 mil litros de combustible, que estaba “medio llena” fue asegurada por policías municipales en una brecha a 2.5 kilómetros de la carretera Torreón Saltillo, donde desconocidos “ordeñaban” un ducto de la empresa Petróleos Mexicanos (Pemex).
Agentes de la Dirección de Seguridad Pública Municipal pertenecientes al Mando Único de General Cepeda, aseguraron el camión cisterna que estaban cargando con gasolina desde una toma clandestina, a la altura del kilómetro 66 de esa carretera, informó la Comisión Estatal de Seguridad (CES), que no reportó personas detenidas.
En un comunicado de prensa señaló que, -en área despoblada de este municipio de la zona sureste de Coahuila-, elementos de la corporación policíaca localizaron la unidad durante un patrullaje por la red de distribución en respuesta a un reporte de la empresa Pemex, que detectó una diferencia de flujo.
La pipa, color blanco, modelo 2014, marca Jost Internactional, con placas de circulación 672WV2, estaba “medio llena”, con aproximadamente 15 mil litros de combustible, y los saqueadores la tenían “conectada” a un ducto con una manguera.
De inmediato los oficiales aseguraron el área a donde, momentos después arribó personal de seguridad de la petrolera, que procedió al traslado del camión cisterna a sus instalaciones en la ciudad de Saltillo donde resguardaron el carburante.
Como se configura la comisión de un delito federal y los resulten de la investigación se dio parte de estos hechos al Ministerio Público Federal (MPF), de la Procuraduría General de la República (PGR), agregó.
Asimismo, apuntó que el Gobierno del Estado refrenda su compromiso de trabajar en coordinación con Pemex para combatir el robo de combustible “que representa pérdidas económicas para la empresa petrolera, además de daños al medio ambiente y el riesgo latente de algún incendio por posibles derrames, con consecuencias impredecibles para la población”.
