Al menos 18 muertos en redada aérea en Alepo
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En el frente diplomático, Damasco anunció que cooperará con el nuevo enviado de la ONU y la Liga Arabe, el argelino Lakhdar Brahimi.
Alepo, Siria.- Al menos 18 personas murieron hoy cuando un avión de combate sirio bombardeó un edificio en la ciudad de Al Bab, en la norteña provincia de Alepo, controlada por los rebeldes, informó el opositor Observatorio Sirio para los Derechos Humanos.
"Los 18 murieron en un solo ataque, entre ellos dos niños, una chica y un chico", dijo el director del grupo basado en Londres, Rami Abdul-Rahman.
Además, activistas de la oposición acusaron a las fuerzas del gobierno sirio de cometer una nueva masacre a las afueras de Damasco y colgaron imágenes online que muestran decenas de cuerpos apilados cubiertos de sangre.
Según su información, algunos murieron a manos de las tropas del presidente Bashar al Assad en el suburbio de Hazza.
La televisión estatal siria, por su parte, informó que las fuerzas del gobierno continuaron persiguiendo a "terroristas" en torno a Alepo e infringieron fuertes pérdidas.
Los Comités de Coordinación Local, un grupo de activistas que documenta la violencia en Siria, informó por su parte que el número de muertos en agosto alcanzó los 5.000, lo que lo convierte en el mes más sangriento desde el inicio del levantamiento contra Al Asad en 2011.
Además cifró en 90 los fallecidos hoy, la mayoría en Damasco.
En el frente diplomático, Damasco anunció que cooperará con el nuevo enviado de la ONU y la Liga Arabe, el argelino Lakhdar Brahimi, igual que hizo con su predecesor Kofi Annan.
"Le escucharemos y él a nosotros", dijo el portavoz del Ministerio de Exteriores, Jihad Makdissi, en una entrevista condecida a una emisora libanesa pro Siria. "Nosotros lo intentamos con el señor Kofi Annan (...) los motivos del fracaso de su plan no están en Siria. El principal motivo fue la falta de consenso internacional", dijo.
Brahimi visitará El Cairo y Damasco este mes para reunirse con funcionarios del gobierno y la Liga Arabe.
Brahimi dijo en declaraciones a la BBC que sentía "el peso de la responsabilidad" en su labor y señaló la "urgente y fundamental" necesidad de un cambio en Siria, aunque no respondió a las demandas de la oposición de que presione para la dimisión de Al Assad.
En Líbano, el primer ministro Nagib Mikati advirtió a las autoridades sirias de violaciones de la frontera, después de que proyectiles cayeran repetidamente en ciudades libanesas.